Lima.- Los intentos de la candidata derechista Keiko Fujimori para revertir el resultado electoral en Perú parecen haberse agotado y el socialista Pedro Castillo se encaminaba a ser proclamado como nuevo presidente, según uno de los abogados de la candidata conservadora.
En el balotaje presidencial del 6 de junio, Castillo se impuso por unos 44.000 votos sobre Fujimori según el recuento del jurado electoral, pero el anuncio oficial del ganador se dilató por las impugnaciones de sufragios y las denuncias de supuesto fraude que presentó la postulante derrotada.
El abogado Julio César Castiglioni dijo este miércoles que todas las impugnaciones fueron rechazadas y el partido de Fujimori acordó apelar un grupo de resoluciones de algunos distritos electorales, pero el número de 5.400 sufragios en juego no cambiará la ventaja del candidato de izquierda.
«En este momento los números lo favorecen, con unos 40.000 votos», dijo Castigloni al ser consultado por Reuters si estas últimas apelaciones ante el jurado electoral podrían variar los primeros resultados que han dado ganador a Castillo.
«Lo que estamos haciendo es sólo agotar los recursos que nos quedan ante el jurado electoral y cumplir así con apelar en aquellos que nos desfavorecen de forma arbitraria», afirmó.
La Organización de Estados Americanos (OEA), la Unión Europea, el Departamento de Estado de Estados Unidos, Canadá y Reino Unido han manifestado, de manera separada, que las elecciones en Perú fueron transparentes.
Las apelaciones de Fujimori podrían dilatar más el anuncio oficial de la presidencia de Perú.
Un portavoz del Jurado Nacional de Elecciones había dicho el pasado lunes que esperan proclamar al ganador la próxima semana.
DISTURBIOS
Las acciones del partido Fuerza Popular de Fujimori estaban complicando además el proceso de transferencia de poder para quien será el nuevo presidente del país, el segundo mayor productor mundial de cobre, a partir del 28 de julio, cuando se debe proceder al cambio al gobierno.
«Rechazamos esta nueva maniobra dilatoria de Fuerza Popular, conjuntamente con su equipo legal, cuyo único objetivo es retrasar o impedir la proclamación del presidente electo», dijo un comunicado del partido marxista Perú Libre, que postuló a Castillo, un sindicalista poco conocido antes de las elecciones.
La ajustada votación ha dividido profundamente a Perú y casi todos los días hay marchas de apoyo a los candidatos.
En el centro de Lima, decenas de simpatizantes de Fujimori provocaron disturbios al intentar llegar al Palacio de Gobierno y la policía tuvo que lanzar bombas lacrimógenas para dispersarlos, según imágenes de la televisión local.
«Invoco a los dirigentes políticos a no incitar este tipo de violencia que puede tener graves consecuencias», dijo el ministro de Salud, Óscar Ugarte, quien refirió que su vehículo fue apedreado por los manifestantes cuando intentaba llegar a la casa presidencial para una conferencia de prensa.
Castillo, un profesor rural de primaria e hijo de campesinos de 51 años, busca una nueva Constitución que dé al Estado un mayor rol en la economía, un plan que ha sacudido a la elite política y empresarial del país sudamericano.
El líder izquierdista continuó en miércoles reuniéndose con legisladores electos de su partido y con políticos de otros, además de visitar a decenas de simpatizantes que permanecen desde hace un mes apostados frente a la sede del jurado electoral para reclamar la proclamación de Castillo.
«Gracias por esta lucha por la democracia, pero no caigamos en provocaciones», dijo Castillo a través de un megáfono.
El abogado del partido de Fujimori dijo que una vez agotado sus trámites ante el jurado electoral no planean realizar ningún otro recurso legal. «La propia candidata ha pedido que no se vaya a presentar ninguna acción ante el Poder Judicial», dijo. (Reuters)