Según un comunicado de la FAO, sin más financiación para combustible, tiempo de emisión y pilotos, las 28 aeronaves que sobrevuelan ahora los cielos para localizar y eliminar a las langostas del desierto podrían no seguir operando.
"La lucha contra la plaga de langostas que se ha congregado en África Oriental está en la actualidad completamente equipada y es capaz de contener, sofocar, y finalmente paliar este aumento que bate récords", ha declarado el director general adjunto del organismo, Laurent Thomas.
Asimismo, ha señalado que los gobiernos han "incrementado su capacidad en un tiempo récord" y ha incidido en que la plaga de langostas ha sido "tremendamente" reducida en "número y tamaño". "Existe una posibilidad real de que este incremento se acabe este año, pero los países necesitan ser capaces de continuar con lo que están haciendo, sin flaquear", ha agregado sobre el parón que se podría producir por la falta de financiación.
En concreto, la FAO ha cifrado en 33,8 millones de dólares la cantidad necesaria para mantener la respuesta hasta junio y ha urgido a sus socios a ayudar a la zona este de África y Yemen a superar la última fase de su maratón contra la langosta.
Un año después del inicio de la plaga de langostas, los países afectados, que en un primer momento no tenían capacidad para dar respuesta a una situación que no se había visto en los últimos 50 años, han enfrentado el azote por aire y por tierra con la ayuda de la FAO.
Según ha precisado el organismo, más de 1,5 millones de hectáreas de tierra han sido tratadas en África Oriental y en Yemen desde el inicio de la campaña para contener la plaga en enero de 2020, de modo que se ha podido ayudar a evitar pérdidas de 1.200 millones de dólares en cultivos y productos, salvaguardando los recursos de 28 millones de personas.
La langosta del desierto está considerada la especie migratoria más voraz del mundo: un ejemplar adulto puede consumir casi su propio peso en comida en un día, lo que equivale a unos dos gramos. Un enjambre de 1 kilómetro cuadrado tiene unos 40 millones de insectos capaces de comerse en un día lo mismo que unas 35.000 personas. (Europa Press)