Facebook cerró la cuenta de Trump después de que éste alentase a sus seguidores a marchar hacia el Capitolio el 6 de enero, con un polémico discurso en el que el magnate neoyorquino puso en duda la legitimidad de la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones de noviembre de 2020.
En un primer momento, se trató de una medida temporal, pero esta se hizo definitiva al día siguiente, después de que los seguidores de Trump asaltasen la sede del Poder Legislativo estadounidense. El consejo asesor de contenido tenía la última palabra y, con una decisión vinculante, ha descartado una posible reapertura de la cuenta.
"El consejo ha concluido que, al mantener una narrativa sin fundamento sobre el fraude electoral y reiterados llamamientos a la acción, Trump creó un ambiente donde era posible un grave riesgo de violencia", han determinado los expertos, que ven un riesgo "claro e inmediato" en los mensajes que publicó a principios de enero el aún presidente.
Consideran por tanto que el cierre de la cuenta estuvo "justificado", si bien afean a la red social que impusiese una suspensión indefinida sin dejar claro cuál había sido el criterio, por lo que plantea que en un plazo de seis meses la empresa "reexamine" esta decisión y decida "la penalización apropiada".
El de Facebook no fue el único veto sufrido por Trump, que también se quedó fuera de Twitter, una red social que utilizó antes y después de llegar a la Casa Blanca para ampliar el alcance de su mensaje e incluso realizar anuncios públicos de índole política.
ESTUDIO DE CASO
Uno de los principales responsables de comunicación de Facebook, el exviceprimer ministro británico Nick Clegg, ha recalcado en un comunicado que la compañía sostiene que la decisión de enero fue "necesaria y adecuada" y, por tanto, celebra que los supervisores hayan entendido que hubo "circunstancias sin precedentes" detrás de una medida "excepcional".
Clegg ha reconocido, no obstante, que puede haber dudas sobre la suspensión indefinida. "Estudiaremos la decisión del consejo y determinaremos una acción que sea clara y proporcionada", ha dicho, para acto seguido subrayar que, hasta nuevo aviso, "las cuentas de Trump siguen suspendidas" tanto en Facebook como en Instagram.
La respuesta del expresidente Trump no se ha hecho esperar y poco después ha arremetido contra los responsables de la red social, a quienes les han censurado que se hayan dejado influenciar por los "lunáticos radicales de la izquierda".
"Esto es una vergüenza total", dijo Trump a través de un breve escrito publicado en 'From the Desk of Donald J. Trump', la plataforma en la que ha estado lanzado sus mensajes desde que fue vetado por las principales redes sociales.
"Se le ha quitado la libertad de expresión al presidente de Estados Unidos porque los lunáticos radicales de izquierda tienen miedo de la verdad, pero la verdad saldrá a la luz de todos modos, más grande y más fuerte que nunca", avisó.
"¡La gente de nuestro país no lo tolerará! Estas empresas corruptas de redes sociales deben pagar un precio político y nunca más se les debe permitir que destruyan y diezmen nuestro proceso electoral", dijo. (Europa Press)