A principios de mes el Gobierno argentino, que observa de cerca los precios domésticos de los alimentos, intentó limitar los embarques de maíz, aunque tuvo que dar marcha atrás tras fuertes protestas de la cadena agrícola.
Ahora la mira del Ministerio de Agricultura de Argentina, uno de los mayores exportadores mundiales de granos, está puesta sobre el mercado del trigo.
"Nos reuniremos en los próximos días con el Gobierno. Ellos no quieren intervenir en el mercado o limitar exportaciones de trigo, pero todo está puesto sobre la mesa", dijo a Reuters Gustavo Idígoras, titular del Centro Exportador de Cereales.
CEC está en contacto con productores agrícolas y molinos para "desarrollar opciones" para presentar a las autoridades, agregó el presidente de la cámara.
Por su parte, el ministro de Agricultura argentino, Luis Basterra, dijo en una entrevista con la emisora local Radio Con Vos que "en el caso de trigo estamos viendo que no nos lleguen a tener que forzar cierres de mercado para que quede trigo acá".
"Entendemos que hay espacio para que en la Mesa del Trigo (donde se encuentran representantes del Gobierno y actores privados) alcancemos acuerdos que permitan el aprovisionamiento del mercado", agregó.
Argentina es el séptimo exportador mundial de trigo y la mayoría de sus embarques tienen como destino a su vecino Brasil. El año pasado el país sudamericano exportó trigo por un valor total de 2.117 millones de dólares, según datos oficiales.
De acuerdo con el último balance de oferta y demanda de trigo elaborado por la cartera de Agricultura, de los 17,2 millones de toneladas de trigo 2020/21 recolectado recientemente, 10 millones serían exportados.
A su vez, datos oficiales muestran que empresas ya realizaron declaraciones juradas de exportaciones de trigo 2020/21 por 8,9 millones de toneladas.
Después de suspender por dos meses las exportaciones de maíz, Argentina cambió esa decisión por un tope diario de embarques de 30.000 toneladas del cereal.
Pero el Gobierno de centroizquierda de Alberto Fernández finalmente descartó estas opciones debido a las amplias protestas del sector agrícola, aunque actualmente mantiene reuniones con representantes de la cadena del maíz para buscar mecanismos que garanticen el abastecimiento doméstico.
De cualquier modo, las propuestas mostraron que Argentina podría acudir a intervenciones del mercado para intentar contener la elevada inflación que sufre el país, que en diciembre fue del 4% y acumuló un 36,1% en 2020. Los expertos esperan que sea mayor en 2021.
Argentina hace años se encuentra en una profunda recesión con alta inflación, que disparó la pobreza, una situación agravada por la pandemia de Covid-19. (Reuters)