Ancira, presidente del consejo de administración de Altos Hornos de México (AHMSA), fue detenido en Palma de Mallorca, España, en 2019 en el marco de una investigación por supuestamente haber pagado sobornos a funcionarios de la petrolera estatal Pemex para que le compraran, con sobreprecio, una planta de fertilizantes en el norte del país.
Parte de los 200 millones de dólares obtenidos fueron transferidos por Ancira a cuentas de Odebrecht, según una investigación preliminar de la fiscalía general mexicana (FGR), que acusa al empresario de 65 años de "asociación delictuosa" y "operaciones con recursos de procedencia ilícita".
La investigación en su contra involucra al entonces mandamás de Pemex, Emilio Lozoya, quien también fue extraditado desde España en 2020 y se encuentra colaborando con la justicia mexicana. Ancira llegó a Ciudad de México la tarde del miércoles en un avión de la FGR procedente de Mallorca, dijeron a Reuters dos fuentes de la entidad.
En el pasado, el empresario y AHMSA han negado las acusaciones y asegurado que las "acciones legales sin sustento" le produjeron a la empresa un impacto de 350 millones de dólares por la cancelación de créditos bancarios y comerciales.
A mediados de enero, AHMSA, la mayor siderúrgica del país, acordó con la FGR pagar al erario mexicano unos 200 millones de dólares en un plazo de cuatro años como reparación económica por el caso de corrupción.
Según la ONG mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCC), la FGR integró al expediente de Lozoya indicios de posibles sobornos adicionales a los 10.5 millones de dólares que Odebrecht confesó le pagó al exejecutivo y de los 3.4 millones de dólares que habría recibido de AHMSA.
La FGR tendría pruebas de transferencias por cerca de cinco millones de dólares a una cuenta, que tenía como beneficiario a Lozoya, realizadas por dos empresas ligadas a OHL, una constructora española que logró millonarios contratos durante el mandato del expresidente Enrique Peña (2012-2018). (Reuters)