Los problemas de liquidez del país andino se agudizaron con la pandemia del coronavirus, lo que obligó al Gobierno a renegociar el año pasado su deuda en bonos soberanos y buscar nuevos créditos con el Fondo Monetario Internacional y otros multilaterales.
"El acuerdo es para la entrega de hasta 3.500 millones de dólares para prepagar la deuda cara y reactivar al sector productivo", dijo Moreno en una rueda de prensa virtual.
El proceso de precancelación de una parte de la deuda pública podría incluir las obligaciones crediticias con China.
Ecuador mantiene acuerdos de compra y venta de largo plazo con petroleras asiáticas que fueron suscritos durante el gobierno del expresidente Rafael Correa, las condiciones financieras han sido cuestionados por políticos opositores.
"La decisión del Gobierno es mantener las mejores relaciones económicas y políticas con todos los países del mundo, incluido el gobierno de China. No hay ningún tipo de implicación de este tipo de acuerdo", dijo el ministro de Economía, Mauricio Pozo, en la misma rueda de prensa.
El acuerdo está atado a que se pueda "monetizar" activos, es decir a proyectos que sean concesionados a inversores privados en sectores de petróleo, telecomunicaciones e hidroeléctricas para obtener mayores recursos e inyectarlos al sector productivo, según el ministro.
Las condiciones de los recursos serán a 8 años plazo y 2,48% de tasa de interés anual e irán llegando de acuerdo a los proyectos que tenga el país en carpeta, dijo Pozo.
La deuda pública de Ecuador se ubicó en unos 60.000 millones de dólares, equivalentes al 62,1 % del Producto Interno Bruto (PIB) del país en noviembre del 2020, según datos oficiales.
El acuerdo con Estados Unidos se suscribe a pocos meses de que Moreno abandone el cargo el 24 de mayo, algo más de tres meses después de que los ecuatorianos acudan a las urnas el 7 de febrero.
El Gobierno dijo que el cambio de autoridades tanto en Estados Unidos como en Ecuador no afectará al desarrollo del acuerdo marco entre ambas naciones. (Reuters)