Los arrestados, Paolo Pruda y Nicola Zanardelli, de 52 y 51 años respectivamente, ambos de Brescia, en la región de Lombardía, la más afectada por la pandemia de Italia, pertenecen al movimiento “No Vax”, que se opone a la vacunación, informó el Cuerpo de Carabineros (policía militarizada) en un comunicado.
Ambos han sido encarcelados como medida cautelar y los agentes están investigando a otras personas “de su círculo” en las provincias de Brescia y Verona.
Se los considera responsables de los daños perpetrados al centro de vacunas de covid-19 de la Vía Morelli de Brescia el pasado 3 de abril, al que arrojaron dos cócteles “Molotov”.
Su explosión quemó la pared del centro, pero el incendio no se propagó por todo el pabellón por la resistencia ignífuga de las instalaciones y otras razones “fortuitas” no reveladas.
No obstante, los carabineros alegan que el ataque podría haber causado desperfectos devastadores en el centro, donde se custodiaban cientos de dosis de vacunas, ya que a pocos metros del lugar del incendio había cables eléctricos por lo que, de haber sido afectados, se habría interrumpido la cadena del frío.
La investigación, para la que se recurrió a las cámaras de vigilancia del lugar y a interceptaciones telefónicas, permitió llegar a los detenidos, seguidores “convencidos” de las tesis negacionistas de la pandemia de coronavirus.
Los agentes constataron la “clara voluntad” de estas dos personas de atentar contra el centro de vacunación y sabotear la campaña para “alimentar el clima de incertidumbre”, dado que pretendían repetir el ataque para infundir miedo entre la gente.
Uno de los arrestados, Pluda, poco antes del incendio, había escrito en Facebook: “Si queremos destruir al enemigo debemos usar la misma arma, el miedo, y su miedo es nuestra unión. No hay otras soluciones”.
Pese a las teorías conspirativas y negacionistas de No Vax, Italia alcanzó el jueves su objetivo de aplicar 500.000 dosis contra el coronavirus en un solo día.
“Ayer en Italia se administraron más de 500.000 dosis de vacunas. Muchas gracias a las mujeres y a los hombres del servicio nacional de salud y a todas las instituciones por este gran trabajo en equipo”, afirmó el viernes en Facebook el ministro de Salud, Roberto Speranza. “La vacuna es el verdadero camino para salir de estos meses difíciles”, destacó.
“Las cifras hablan claramente: el 1 de marzo, el número de dosis diarias administradas se elevaba a 135.307, hoy pasamos la barrera de las 500.000 (...) en sólo dos meses”, comentó por su parte el subsecretario de Defensa, Giorgio Mulé.
Un general, Francesco Paolo Figliuolo, es el encargado de coordinar la campaña italiana de vacunación, que registró un importante impulso, administrando 397.000 dosis el miércoles, contra 365.000 el día anterior.
Si este ritmo se mantiene, el país podría alcanzar el objetivo de inmunizar al 60% de los italianos para finales de julio.
Hasta la fecha se han administrado en la península un total de 19,5 millones de dosis y, al igual que en otros países europeos, se ha dado prioridad a las personas de mayor edad y al personal sanitario. (Infobae)