Un grupo de disidentes de las FARC que sostuvo fuertes combates con la Fuerza Armada Nacional Bolivariana en el estado Apure, fronterizo con Colombia, amenazó a los habitantes de dos caseríos de esa región para que abandonen sus hogares, denunció la ONG Fundaredes.
La población de los caseríos El Ripial y La Capilla, ambos partes del municipio Páez en Apure, han sido amenazadas por los disidentes que “les han conminado a abandonar el territorio, toda vez que se activará el conflicto armado por el control de esta zona”, detalló el director de Fundaredes, Javier Tarazona, en un vídeo publicado en sus redes sociales.
Los combates en Apure, que duraron más de dos meses, se extendieron desde el 21 de marzo hasta el 30 de mayo, lapso en el que perdieron la vida un número indeterminado de miembros de la FANB, así como varios miembros de un grupo de disidentes de las FARC.
Durante los mismos, también fueron secuestrados ocho militares venezolanos, liberados tras permanecer varios días en manos del grupo armado ilegal.
La información difundida por fuentes oficiales o castrenses ha sido muy escasa y varias organizaciones como Fundaredes con presencia en la zona han contrarrestado esa escasez de datos.
POCA INFORMACIÓN
Según dicha organización, los familiares de dos militares desaparecidos el 23 de abril, durante los combates, siguen sin tener información sobre su paradero y, además, reciben llamadas «intimidatorias».
Al respecto, Tarazona reiteró este sábado que mantienen su petición para conocer el paradero de los dos uniformados, a los que identificó como el sargento de tercera Dany Vásquez y el sargento primero de fragata Abraham Belisario Bastidas.
Por ello, le pidió al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y a la ONU que ayude en su localización.
En marzo pasado, poco después de comenzar los combates, cerca de 6.000 habitantes de la zona se desplazaron al vecino departamento colombia de Apure, una información que adelantó Fundaredes y, posteriormente, fue confirmada por varias organizaciones. (Europa Press)