Bolívar y The Strongest volverán a quedar cara a cara por la disputa del título de campeón en el fútbol boliviano, tras una campaña celeste que mostró una línea de efectividad para llegar como uno de los equipos con la delantera más peligrosa frente a la garra, una prenda de garantía del cuadro de Achumani a la hora de resolver los compromisos.

En la fase de grupos, Bolívar ganó su grupo con 37 puntos, de manera anticipada logró la clasificación a la siguiente fase y dejó detrás una marca imparable de goles con un total de 37, en 12 triunfos, un empate y tres derrotas. En contrapartida, recibió nueve. En los cuartos de final tuvo problemas ante Oriente Petrolero, pero la fábrica de los goles volvió a rodar ante Blooming y en estos cuatro cotejos convirtió ocho y recibió tres, con lo cual, hasta la fecha, llega a 50 tantos y 12 en contra.

El grosor de esta efectividad descansa en Bruno Miranda, autor de nueve goles, que se perfila como goleador de este torneo, pero no es el único: Bruno Sávio y Francisco Da Costa están detrás con ocho. Contrario a esto, The Strongest no cuenta con un jugador que pelee por el cetro de goleador. El mediocampista Jaime Arrascaita está con cinco goles como el atigrado más efectivo y que refleja que el trabajo colectivo del cuadro de Achumani por encima de las individualidades.

En la ronda por serie, el Tigre acumuló 21 goles y recibió 11, quedando por debajo de Nacional Potosí (31), Oriente Petrolero (22) y Real Santa Cruz (22). El elenco gualdinegro clasificó como segundo en el “B”, después de siete triunfos, seis empates y tres derrotas.

Esta imagen se volteó en los cuartos de final y en la semifinal, instancias en las cuales ya no pasó por los apuros de la anterior fase y aplicó su coraje para ganar ida y vuelta. En estos cuatro encuentros convirtió 11 y recibió dos. Llega a la final con 32 conquistas y recibió 13. Detrás de estas cifras está parte del estilo de juego que instruyen los entrenadores en las prácticas. El argentino Cristian Díaz, criticado por la hinchada atigrada por cuidar de manera a veces excesiva el resultado, tendrá la oportunidad de mostrar un rostro diferente en este encuentro de 90 minutos.

Entretanto, el brasileño Antonio Zago, inclinado por el dominio de las acciones y el juego vertical, tratará de mantener esta línea en una final en la cual el mínimo error puede llevar al precipicio.

LOS DOS MANEJAN SUS ASES BAJO MANGA

Tanto Cristian Díaz como Antonio Carlos Zago tienen todo definido de cara al clásico, pero obviamente no darán a conocer su once titular. En el Tigre, con Ismael Benegas y Gonzalo Castillo recuperados, es improbable que puedan ser tomados en cuenta desde el inicio, porque aún no están al cien por ciento de sus facultades, tomando en cuenta que salen de sendas lesiones. Pero Richet Gómez ha cumplido en los últimos compromisos y tiene ritmo competitivo y sería titular. En el medio es probable que Jaime Arrascaita reciba la confianza en desmedro de Rodrigo Amaral. Por el lado de Bolívar, el Sub 20 será Yomar Rocha, mientras es segura la presencia desde el inicio del argentino Patricio Rodríguez, ausente por suspensión del equipo ante Blooming.

16.00 horas del domingo será el momento en que comenzará a rodar el balón en el estadio Hernando Siles.

EL DIARIO Y APG