Vale quedarse con una sentida nota de despedida que le tributó James Riach, de The Guardian, un prestigioso medio británico. Bajo el título «Marcelo Bielsa transformó el Leeds con decencia, humildad y trabajo», desgranó sus percepciones, vivencias y todo lo que recogió en estos tres años y medio de gestión del entrenador argentino en el club.
«En Chile se autodenominan «viudas de Bielsa». El mismo sentimiento se puede encontrar en el Marsella y el Athletic de Bilbao, equipos que miran a la etapa del argentino con los ojos muy abiertos y una nostalgia palpable. El Leeds se encuentra en el inicio de este proceso, sin duda doloroso, de asimilación de la vida después de Bielsa, una vida que nunca volverá a ser la misma.»
Las emociones continuaron en Wetherby, un poblado en las afueras de Leeds, donde los vecinos del ilustre ya exentrenador decidieron acercarse a tributarle (más) afecto. Una cantidad considerable de aficionados fue a saludarlo a Thorp Arch, el centro de entrenamiento del club, donde Bielsa estuvo durante el domingo, del que se retiró cuando ya era de noche.
Hubo muestras de respeto, algunos cantos y seguramente lágrimas. «Maaaarcelo Bielsa», entonaban, como hacían en el estadio Elland Road en las mejores épocas del equipo bajo su conducción. Como decía el periodista de The Guardian, sabían que «la vida ya no sería la misma sin el Loco». (La Nación)