El Nápoles abrió el marcador con un tanto de Piotr Zielinski (29), pero Ferran Torres puso el 1-1 de penal (59), con lo que la eliminatoria se decidirá en la vuelta en Nápoles la próxima semana. El Barcelona fue de menos a más en su inicio en la Europa League, un trofeo que todavía no tiene en sus vitrinas y que los azulgranas aspiran a ganar como medio de estar en Champions la próxima temporada. Los azulgranas, animados por su público, empezaron empujando a sus rivales hacia su campo, pero con el paso de los minutos, el Nápoles fue sacudiéndose la presión local para llegar a los dominios de Marc-André Ter Stegen.
El Barça volvió a mostrar sus problemas de pegada estrellándose una y otra vez en la buena defensa del equipo menos goleado del campeonato italiano, pese a terminar el encuentro encerrando al Nápoles. “Da rabia porque es un partido para ganar, por las ocasiones, el dominio, el juego… Da pena, pero con las sensaciones me voy contento”, dijo el técnico barcelonista, Xavi Hernández, tras el partido. (Infobae)
24 de febrero será el partido revancha por la Europa League, en el estadio Diego Armando Maradona de la ciudad de Nápoles.