El único gol del partido lo marcó Mathew Leckie a los ´60 minutos de juego.
Australia ganó a Dinamarca (1-0) en el último partido del Grupo “D” del Mundial de Catar y logró igualar la gesta de 2006 al avanzar, contra todo pronóstico, a los octavos de final gracias a un golazo a la contra de Leckie que borró del mapa a unos ‘vikingos’ que remaron sin rumbo.
Dependía de sí mismo el equipo oceánico y no falló. Estuvo dos minutos fuera de los octavos, cuando Túnez se adelantó provisionalmente contra Francia, pero un bello tanto de Mathew Leckie en el minuto 60 volvió a formar un terremoto en las gradas del Estadio Al Yanub que llegó como tsunami a Australia.
Los ‘Socceroos’ están otra vez, 16 años después, en unos octavos de final de un Mundial. Lo hicieron en 2006, en la que era su segunda presencia en un campeonato del Mundo. Ahora, con un equipo sin grandes estrellas y siendo la ‘cenicienta’, los ‘canguros’ saltan a octavos para dar una de las grandes sorpresas de Qatar 2022.
Fue Leckie, el extremo izquierdo del Melbourne City –equipo del conglomerado de clues del Manchester City–, quien a sus 31 años logró el gol de su vida. Su carrera y sus regates cambiaron el signo del partido y el rumbo de una Dinamarca que ya iba perdida y que fue incapaz de encontrar la meta australiana. Así, los de Graham Arnold repetirán el sueño de los octavos 16 años después.
Empezó mejor Dinamarca, con una gran ocasión para Jensen en el minuto 11 que Mathew Ryan anuló. En el 18′, el exportero de Valencia o Real Sociedad volvió a desviar un centro peligroso de Joakim Maehle. Pero ahí se perdió la nave ‘vikinga’, incapaz de llegar a una Australia cada vez más lejos en el verde, en el marcador y en la clasificación del grupo.
Tras el descanso, en el 58′, Túnez activó sin quererlo a Australia. Hacía dos minutos que los ‘aussies’ se veían fuera del Mundial. Dos minutos desde el tanto de Túnes ante Francia que les apeaba de Qatar 2022. Y, como si lo supieran, los ‘socceroos’ fueron raudos a por el gol. Tanto, que en esos dos minutos, Leckie obró la magia.
El extremo aprovechó una rápida contra de Australia, tras recuperar un balón en su propia área, para caracolear a su defensor con un recorte hacia dentro y otro más hacia fuera para, con precisión, cruzar el balón y superar al portero Kasper Schmeichel. Golazo que metía de nuevo a los ‘aussies’ en los octavos de final.
A partir de ahí, el seleccionador danés Kasper Hjulmand revolucionó al equipo. Dio entrada a los delanteros Kasper Dolberg –que marcó en el 71′ pero en fuera de juego, y el VAR actuó para anularlo– y Andreas Cornelius, además de modificar el sistema. No hubo manera.
Christian Eriksen fue de más a menos y la luz de su faro se fue apagando, igual que las opciones de clasificación para los suyos. Dinamarca necesitaba dos goles pero la verdad es que no gozaron de ninguna ocasión clara, ni siquiera, para empatar. Un ‘escorpión’ de Dolberg, que llegó flojo y blando a las manos de Ryan, fue lo más destacado. Fin de expedición ‘vikinga’ y nuevo salto de los ‘cangaroos’ hacia la historia.
SÍNTESIS
–resultado: australia, 1 – dinamarca, 0 (0-0, al descanso).
–equipos.
AUSTRALIA: Ryan; Degenek, Rowles, Souttar, Behich; Mooy, McGree (Wright, min.74), Ivrine; Leckie (Hrustic, min.89), Goodwin (Baccus, min.46) y Duke (MacLaren, min.82).
DINAMARCA: Schmeichel; Kristensen (Bah, min.46), Andersen, Christensen, Maehle (Cornelius, min.69); Höjbjerg, Jensen (Damsgaard, min.59), Eriksen; Skov Olsen (Skov, min.69), Lindstrom; y Braithwaite (Dolberg, min.59).
–goles.
1-0. Min.60, Leckie.
–ÁRBITRO: Mustapha Ghorbal (ARG). Amonestó a Behich (min.4), Degenek (min.57) en Australia y a Skov (min.75) en Dinamarca.
–ESTADIO: Estadio Al Yanub.
EUROPAPRESS