Roma.- El anuncio de la llegada de la ola de calor a Italia para los próximos días, ha puesto en alerta a las autoridades y a los servicios de emergencia ante la posibilidad de que estallen más incendios forestales y empeoren aún más los frentes abiertos, sobre todo en el sur del país.
«Las temperaturas que nos esperan en los próximos días requieren la máxima atención», ha dicho este domingo el jefe de Protección Civil, Fabrizio Curcio. «Es fundamental evitar cualquier comportamiento que provoque incendios y reportarlos a tiempo, aunque sean pequeños, ha señalado.
Curcio ha descrito los esfuerzos realizados en las últimas horas para contener los incendios forestales que se han registrado como «desafiantes» y «dramáticos». Una situación que podría aún empeorar en lugares como las islas de Sicilia y Cerdeña, donde las temperaturas podrían subir hasta los 45 grados este martes.
Protección Civil ha desplegado este domingo también más refuerzos a las regiones del sur de Calabria y Apulia, de las más afectadas por los incendios después de los territorios insulares, tras un decreto emitido por el primer ministro italiano, Mario Draghi, para permitir al organismo enviar más dotaciones y personal.
Otras regiones como Lazio, Campania, Molise, Umbría, Abruzzo y Basilicata están viviendo circunstancias similares los últimos días. Los equipos de Bomberos han estado este domingo intentando sofocar nuevos brotes en la ciudad de San Mauro Castelverde, en Palermo, así como otro incendio cerca Cesane, una ciudad próxima a la costa del mar Adriático.
En esa zona, los equipos de rescate han tenido que llevar a cabo este domingo la evacuación de más de 400 personas a medida que las llamas se acercaban a la turística localidad de Campomarino, en la costa adriática.
Las autoridades han informado del despliegue de una avión de extinción y de un helicóptero para ayudar a los equipos de bomberos. A pesar de la violencia de los incendios y de las imágenes que se han publicado en redes sociales sobre la situación de esta pequeña comunidad, habitada principalmente en temporada de verano, no se han reportado víctimas mortales.
DAÑOS INCALCULABLES
Los cultivos y las reservas naturales del país están siendo pasto de las llamas, han alertado desde diferentes organizaciones y colectivos, como la asociación agrícola Coldiretti, que señala directamente a la sequía que azota ya varios países del mediterráneo, como Grecia y Turquía, -también enfrentándose al fuego- provocada por el cambio climático como responsable de estos incendios.
Reservas naturales, como el Parque Nacional Aspromonte en Calabria, en el sur, y el Parco delle Madonie, al este de Palermo, se han visto también afectados a pesar de los esfuerzos desplegados por las autoridades.
«Una vez más, las áreas naturales protegidas están bajo las garras de devastadores incendios», ha lamentado el presidente de la Federación Italiana de Parques y Reservas Naturales (Federparchi), Giampiero Sammuri.
Cerca del pequeño pueblo de San Lorenzo, en el límite del Parque Nacional Aspromonte, un hombre y una mujer murieron en relación con los incendios cuando los incendios alcanzaron su finca, dijo el viernes el cuerpo de bomberos.
Por el momento, se han registrado unos 44.500 incendios forestales desde el 15 de junio, según datos oficiales. El año pasado, hubo poco menos de 26.200 durante el mismo período. Al menos dos personas han fallecido este viernes en la región italiana de Calabria debido al fuego.
Mientras tanto, en el norte de Italia, crece la preocupación de que las fuertes lluvias puedan provocar inundaciones y corrimientos de tierra. El aumento del nivel del agua ha aumentado en las últimas horas, inundando garajes y caminos. Hasta ahora, solo se han registrado daños y pérdidas materiales. (Europa Press)