Entre el 14 y el 20 de febrero se realizaron controles a 104.178 personas antes de entrar en Alemania y de ellas se rechazó a 15.877, un 15 por ciento, según la publicación. De ellas, se negó el acceso a 4.522 personas por no aportar una prueba negativa de coronavirus.
Otros de los motivos por los que se prohibió la entrada fueron el no haberse inscrito en el registro digital de viajeros de carácter obligatorio o no pertenecer a ninguno de los grupos a los que, como excepción, se permite el acceso al país.
El 14 de febrero Alemania instauró controles fronterizos con República Checa y la provincia austriaca del Tirol para limitar la propagación de la mutación británica del coronavirus B.1.1.7, muy extendida en suelo checo, y de la variante sudafricana, muy presente en el Tirol.
El Gobierno alemán también estableció normas de entrada aún más estrictas para viajeros procedentes de Eslovaquia: ni las aerolíneas, ni las compañías ferroviarias o de autobuses pueden transportar a Alemania pasajeros de Eslovaquia, país muy afectado por la mutación británica.
Las excepciones de acceso incluyen a ciudadanos alemanes y a extranjeros con permiso de residencia. También incluyen a los conductores de camiones y a aquellos que tienen que cruzar la frontera para trabajar, siempre y cuando ejerzan profesiones relevantes para el sistema, como personal médico y de enfermería. Para acceder hay que contar con un test de resultado negativo de coronavirus realizado en las últimas 48 horas.
Mientras, el ministro de Asuntos Exteriores de Luxemburgo, Jean Asselborn, advirtió a Berlín de que no cierre la frontera con su país. "Naturalmente, hay que hacer pruebas por las mutaciones del virus, pero debemos hacer todo lo posible para que los trabajadores transfronterizos puedan llegar a sus puestos de trabajo sin restricciones", afirmó Asselborn a RND.
El ministro recordó que el 60 por ciento del personal de hospitales y asilos luxemburgueses cruza a diario la frontera desde Alemania, Francia y Bélgica. "Si no pueden entrar al país, colapsará el sistema de salud en Luxemburgo", ha apuntado. (Europa Press)