Ministerio de Sanidad ecuatoguineano ha confirmado en un escueto comunicado en Twitter que además 615 personas resultaron heridas tras las explosiones, de las cuales 316 han recibido el alta, mientras que 299 permanecen ingresados en el Hospital Regional de Bata, el Centro Médico la Paz y el Hospital Nuevo Inseso.
El vicepresidente de Guinea Ecuatorial, responsable de Defensa Nacional y Seguridad del Estado, Teodoro Nguema Obiang Mangue, conocido como “Teodorín”, hijo del presidente Teodoro Obiang Nguema, ha comparecido en rueda de prensa para informar del nuevo balance de víctimas.
"Con este trágico suceso quiero invitar a toda la población a la calma y su acercamiento con apoyo material y moral", ha afirmado Nguema en una comparecencia recogida por la Radio Televisión de Guinea Ecuatorial (RTVGE).
Obiang aseguró a la población de Bata, ciudad más poblada del país, que ya no hay peligro y que pueden regresar a sus viviendas después de que se hayan podido escuchar explosiones de menor magnitud durante la noche del domingo al lunes. El vicepresidente ha advertido además de que "no es momento de pregonar bulos" o "noticias falsas" en redes sociales.
Sin embargo, ha advertido de que no se debe tocar ningún "objeto extraño" o inusual que sea hallado, ya que podría tratarse de munición sin explosionar. Nguema ha planteado un plazo de diez días para la conclusión de las labores de limpieza.
El pasado domingo se sucedieron al menos cinco grandes explosiones en la zona del cuartel de Nkuantoma que destruyeron gran parte de los edificios de las propias instalaciones militares y de las viviendas colindantes.
Este lunes, al día siguiente de las explosiones, el presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema, de 78 años, se ha inoculado con la segunda dosis de la vacuna contra el coronavirus, ha animado a la población a vacunarse y ha hecho un llamamiento a la población a ayudar a los damnificados.
"Es lamentable lo que ha ocurrido en la ciudad de Bata. Evitemos cualquier acto de inseguridad del país. A veces la gente cree que la paz es un efecto de ausencia de la guerra, pero lo que ahora se vive en Bata es parte de la guerra", declaró Obiang, según recoge la RTVGE.
El mandatario ha atribuido lo ocurrido a la "imprudencia" y la "ignorancia" y la "malicia de los que conocían la peligrosidad" de la dinamita a la que atribuye las explosiones. "Los que han ido a depositar la dinamitas cerca del depósito de municiones son los que evidentemente debemos acusar porque la dinamita se utiliza para romper la piedra. Tiene una fuerza de destrucción de un alcance muy peligroso", explicó.
"La dinamita normalmente, en otras partes, se guarda muy lejos de la población. Incluso se guarda debajo de la tierra (...). Por eso hemos sufrido esa devastación prácticamente nos está costando un gasto económico, material y una inseguridad humana", añadió.
Ante esta situación, Obiang ha recordado que el Gobierno ya ha solicitado la ayuda internacional a través de una reunión mantenida el domingo por el ministro de Asuntos Exteriores de Guinea Ecuatorial, Simeón Oyono Esono Angue, con embajadores extranjeros. En ese mismo sentido, Obiang ha invitado a toda la población de Guinea Ecuatorial, "a los bienhechores que puedan ofrecer para que los damnificados puedan tener asistencia", y ha convocado una reunión de emergencia del Gobierno.
LABORES DE RESCATE
Mientras, efectivos de Protección Civil y Bomberos continúan con las labores de búsqueda de víctimas entre los escombros y hasta ahora han podido rescatar a más de 60 personas.
La propia RTVGE publicó imágenes de los equipos de rescate evacuando cuerpos sin vida rescatados de entre los escombros de los edificios derribados por las explosiones. Igualmente se han publicado imágenes de restos de proyectiles y munición detonados durante las deflagraciones.
"Todas las casas de los efectivos que aquí vivían están completamente destrozadas", relató un corresponsal de RTVGE que ha visitado el lugar de las explosiones.
En el marco de la respuesta a la tragedia, el Ministerio de Sanidad preparó una brigada de salud mental compuesta por psiquiatras, psicólogos y enfermeras especializados en "situaciones de contingencia" para atender a las víctimas de la explosión "porque los daños no son solo físicos sino también mentales", ha apuntado el Ministerio.
"La brigada de salud mental atenderá no sólo la enfermedad psíquica sino también la angustia, el duelo, los comportamientos violentos y el consumo excesivo de sustancias psicoactivas que puede surgir en circunstancias trágicas", según el Ministerio.
Además, medios oficiales informaron de que se ha enviado un avión con bolsas de sangre desde la capital, Malabo, hacia Bata para abastecer a los hospitales, desbordados desde el domingo por los heridos. Ya el domingo se hizo un llamamiento a donar sangre en los hospitales de la parte continental del país, pero también en las islas.
Por su parte, el principal partido opositor, Convergencia para la Democracia Social (CPDS), ha hecho circular una nota de prensa según la cual el Ejército ha ordenado la evacuación del barrio de Nkolombong, el más poblado de la ciudad y colindante con Nkuantoma, donde se encuentra la base militar.
Asimismo, el partido opositor ha denunciado restricciones en las redes sociales y ha manifestado que "no se pueden descargar imágenes ni audios". "Sólo los mensajes escritos pasan con fluidez", ha añadido, tal y como ha recogido Radio Macuto. (Europa Press)