El Ministerio del Interior iraquí ha dado este nuevo balance del grave incendio, según recoge la agencia de noticias oficial del país, NINA. "Hay una investigación en marcha. Hay investigaciones técnicas y penales para determinar las circunstancias del incidente", ha explicado el portavoz del Ministerio, Saad Maan.
Medios de comunicación iraquíes señalan que la causa del incendio puede estar en un fallo del sistema de oxígeno de una unidad de cuidados intensivos del centro hospitalario. Otras fuentes apuntan a un cortocircuito.
En una de las primeras consecuencias políticas de la tragedia, el ministro de Salud iraquí, Hasán al Tamimi, ha sido suspendido temporalmente de sus funciones y será interrogado por las autoridaes como parte de la investigación sobre el incendio, como también lo será el gobernador de Bagdad, Mohamed Jaber, según un comunicado de la oficina del primer ministro del país, Mostafá al Kazemi.
"Al Kazemi ordenó una investigación inmediata sobre las causas del accidente y que el director del hospital, el director de seguridad y los responsables del mantenimiento de los dispositivos en el hospital fueran interrogados", se lee en el comunicado.
Además, autorizó amparar a todas las víctimas del accidente para cubrir el coste de su tratamiento sanitario y considerar "mártires" a los fallecidos, lo que otorga a sus familiares beneficios económicos, según recoge la agencia de noticias oficial, NINA.
Por su parte, la Presidencia del Parlamento iraquí ha instado a la Comisión de Sanidad y Medio Ambiente a "ejercer su función de supervisión" e investigar lo ocurrido para presentar sus conclusiones en sesión plenaria de la Cámara convocada para este mismo lunes.
Por su parte, la dirección de defensa civil ha anunciado que el incendio ha sido apagado. "Los equipos de defensa civil han realizado grandes esfuerzos para salvar a los enfermos infectados por coronavirus a través de ventanas y escaleras de emergencia", ha indicado en un comunicado la dirección de defensa civil.
Mientras, la representante especial de la ONU para Irak, Jeanine Hennis-Plasschaert, ha manifestado su "conmoción" por la "enormidad de la tragedia" y ha trasladado su pésame a las familias de los fallecidos.
"La representante especial pide mayores medidas de protección para garantizar que no se pueda repetir un desastre así", apuntó Hennis-Plasschaert en un comunicado oficial.
Estados Unidos también ha dado sus condolencias por la tragedia a través del asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan. "Lamentamos la pérdida de vidas en el incendio del hospital. Estamos en contacto con funcionarios iraquíes y les hemos ofrecido asistencia. Nuestra asociación estratégica con Irak es ante todo una asociación entre nuestros dos pueblos y estamos dispuestos a apoyar al Gobierno iraquí y a su pueblo en este trágico momento", ha hecho saber.
Irak tiene más de un millón de casos confirmados de coronavirus, por lo que es el país con una tasa de contagio más alta de todo el mundo árabe. (Europa Press)