El Gobierno de Sudáfrica actualizó ayer la cifra de fallecidos en el marco de las protestas que desde hace días sacuden el país en contra del encarcelamiento del expresidente Jacob Zuma por desacato, y ya son 117 las personas que han muerto y más de 2.200 las que han sido detenidas.
La ministra interina de la Presidencia, Khumbudzo Ntshavheni, ha comparecido ayer para actualizar la información de las protestas, detallando que hasta el momento se han notificado 26 decesos relacionados con las protestas en la provincia de Gauteng y 91 en la de KwaZulu-Natal.
En cuanto a las detenciones, las fuerzas de seguridad han arrestado a 725 personas en Gauteng y 1.478 en KwaZulu-Natal. Además, Ntshavheni ha precisado que, de la lista de 12 «instigadores» que se cree están detrás de la violencia, se ha detenido a uno.
En Gauteng, se han registrado «menos incidentes durante la noche, en parte debido al despliegue de las fuerzas de seguridad», y mientras que en KwaZulu-Natal se han notificado menos incidentes, la situación sigue siendo «volátil», explicó Ntshavheni, recoge “News24”.
Ayer, el Gobierno ha anunciado planes para desplegar a otros 25.000 militares para hacer frente a las protestas y disturbios de los últimos días tras el encarcelamiento de Zuma.
La Unión Africana (UA) condenó el pasado martes «el aumento de la violencia» en Sudáfrica y pidió «restaurar urgentemente el orden, la paz y la estabilidad» en el país africano, al tiempo que dijo que la incapacidad de restaurar el orden «podría tener graves impactos no sólo en el país, sino en la región.
Las protestas estallaron después de que Zuma ingresara en prisión después de que el Tribunal Constitucional le condenara a 15 meses de cárcel por negarse a testificar ante un panel de jueces que está investigando los presuntos casos de corrupción en los que estuvo implicado durante sus nueve años de mandato al frente del país.
Zuma se convirtió así en el primer presidente elegido democráticamente en Sudáfrica que es condenado a prisión desde que el Congreso Nacional Africano (ANC) –partido que encabezó entre 2007 y 2017, cuando fue apartado en un consejo interno por su vicepresidente, Ramaphosa– se hizo con el poder en 1994.
La caída de Zuma tuvo lugar en medio de la indignación popular por el peso de la familia Gupta, de origen indio, en la economía y la política del país africano, acusaciones que fueron recogidas en un informe de la ex defensora pública sudafricana -figura equivalente al Defensor del Pueblo- Thuli Madonsela titulado “La captura del Estado”. (Europa Press)