Ese hecho, generó una sonrisa en el atacante colombo boliviano, quien había sido bastante criticado por su sequía goleadora que se rompió ante Palmaflor el anterior miércoles. Luego, el domingo pidió rematar el penal del Tigre ante Universitario y anotó.
«Al final hice ese gol y resulta que había hecho 160 (se equivocó, tiene 161), no sé qué era que tanto me criticaron (sonrió), es complicado, pero ya está, siempre esperan más de uno, yo siempre voy a estar ahí, aceptando las críticas pero trabajando», afirmó ayer en la zona mixta atigrada, al final del entrenamiento matinal.
Reinoso reconoció que la pasó mal en el tiempo de sequía, sobre todo por las críticas hacia él.
«Sí es complicado por la familia, por eso fue complicado, pero siempre tuve el respaldo del cuerpo técnico y la dirigencia, además de mis compañeros, nunca me había pasado, no sé si algún jugador le pasará lo que me pasó a mí», agregó ayer.
Eso sí, aclaró que lo que ha hecho en el fútbol boliviano no se podrá borrar: «cualquier cosa van a decir, como le dije a mi esposa, esto ni con lavandina lo van a borrar».
Al igual que sus compañeros, apunta con todo al Caracas, con el que se enfrentarán este miércoles desde las 22.00 en el estadio Siles.