España se dejó en el viaje a Lille las buenas sensaciones con las que llegaba a los Juegos y en el arranque de la competición de baloncesto cayó ante Australia por 92-80. La derrota complica su viaje olímpico a la espera de enfrentarse el martes próximo a Grecia y el viernes a Canadá, sus rivales en el grupo (acceden a cuartos los dos primeros y los dos mejores terceros). El histórico registro de seis participaciones de Rudy en los Juegos quedó empañado por un patinazo tan claro como doloroso. Australia acumuló 13 rebotes más (46-33) y frustró la resistencia de Santi Aldama (27 puntos) en el estadio Pierre Mauroy.
Tres tiros libres ganados por Patty Mills y un triple de Landale anticiparon el bombardeo australiano en el primer cuarto. A la selección española le costaba un mundo frenar las penetraciones de Daniels, Giddey y el mismo Mills, Landale podía con Willy en la pintura y el aro escupía los lanzamientos lejanos de Brown, Abrines y Aldama. España no entraba en el partido y Australia aprovechó tanto bostezo para darle un buen bocado al marcador: 18-7 en menos de cinco minutos. Scariolo reunió a sus muchachos en la silla de pensar y agitó el banquillo en busca de soluciones. (EL PAÍS)