Para quienes crecimos con un ídolo en el fútbol como Luis Esteban Galarza, su partida nos genera un sincero y profundo sentimiento de dolor por todo aquello que vivimos en su trayectoria profesional como jugador y por cuanto estamos ante uno de los mayores emblemas de la Garra Stronguista, principal característica de esta Gloriosa Institución.
Tal vez, el mayor referente de los últimos tiempos de lo que es poner en la cancha alma, vida y corazón junto a los Fontana, Iriondo, Ángulo, Martínez, Messa, Potente, Bastida, Latini y muchos otros que forjaron un nuevo renacer para el Tigre luego de Viloco a punta de garra, pasión y sentimiento. Garra de la cual hacemos gala todos los Stronguistas en cada partido. Todos ellos forjadores valientes de una página más dentro de la rica y vasta Historia del Club Decano del Fútbol Nacional Boliviano.
Hicieron Historia y eso no es ni poco ni fácil.
Luis Galarza escribio esa página además con Honestidad, Humildad e Integridad dentro y fuera de la cancha, cuando al futbolista le interesaba más defender su camiseta antes que los intereses personales o económicos. Se desarrolló acorde a la talla de dirigentes como los Mendoza, Azcárraga, Oporto Lenz y muchos otros dignos Stronguistas gracias a los cuales y a su entrega hoy tenemos el legado de un Club Deportivo que se hizo en base a principios y valores. Generando la alta valía que hoy por hoy tiene esta Digna Institucion. Lucho estuvo a la altura histórica, construyendo todo esto desde su pórtico en cada jornada.
Y algo que además tenia Luis Galarza era Sentimiento, lo cual lo convertía en el mejor arquero del Tigre y del País, por la entrega que le daba a su función, por su capacidad deportiva, por su sencillez, por su hombría y por todo aquello que le permitió hacer su trabajo con amor y entrega, gracias a lo cual vivimos inolvidables jornadas llenas de valor y coraje. Como era Luis…
Constancia de todo esto pude vivir cuando la Institución lo honró como Director Tecnico de nuestro Primer Plantel, logrando bajo su Dirección ganar el épico Título de Campeones del Fútbol Boliviano del año 2004. Aquel Título que conseguimos ganarlo con Luis en cancha y batallado en mesa hasta en la Conmebol, cuando en una Final de Campeonato no había sido previsto el doping y el rival corría como nunca, cuando con Lucho y con ese heróico plantel que fue mermado injustamente durante todo el Campeonato, nos llevamos la torta de la fiesta que ya habían organizado. Ahí estaba Lucho batallando a su estilo como siempre para ser Campeón. Como no agradecerle por todo y por tanto que dio desinteresadamente a la Institucion Gualdinegra y a todo el Fútbol Boliviano. De lo cual todo el país es testigo..
Se nos fué y me quedo con la amargura de que este grande del Futbol Nacional no haya recibido en vida todos los Homenajes que se merecía.
Queda su legado, un hermoso legado para orgullo de su esposa, sus hijos, sus nietos, toda su familia y toda la Comunidad Futbolera Nacional y Stronguista.
Hombre valiente y de decisiones, que asi como un dia decidiste ya no jugar más al futbol, estoy seguro que de igual forma con tu coraje de siempre decidiste partir para no angustiar más a nadie. Ese era Lucho…..
Gracias Ídolo !!!!!!! Estarás siempre en nuestros corazones y en la Historia del Fútbol Nacional.
JORGE PACHECHO