El gobierno de Taiwán espera desplegar al menos dos nuevos submarinos de fabricación nacional antes de 2027, y posiblemente equipar con misiles los modelos posteriores, para reforzar la disuasión frente a la armada china y proteger líneas de suministro clave, declaró el responsable del programa.
Taiwán, que China reclama como territorio propio, hizo del programa de submarinos autóctonos una pieza clave de un ambicioso proyecto de modernización de sus fuerzas armadas, mientras Beijing realiza ejercicios militares casi a diario para afirmar su soberanía.
El submarino, que se llamará Hai Kun en honor al monstruo marino de una leyenda china, es el primero de los ocho previstos para reforzar las defensas de la isla frente a la creciente armada china.
La presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, que inició el programa cuando asumió el cargo en 2016, tiene previsto lanzar el jueves el primero de los submarinos en el marco de un plan que aprovechó la experiencia y la tecnología de varios países, lo que supone un gran avance para el aislamiento diplomático de la isla.
El almirante Huang Shu-kuang, asesor de seguridad de Tsai, que dirige el programa, dijo que una flota de 10 submarinos que incluye dos de fabricación holandesa encargados en la década de 1980, dificultará a la armada china proyectar poder en el Pacífico.
Huang dijo que el primer submarino, valorado 1.540 millones de dólares, utilizará un sistema de combate de Lockheed Martin Corp (LMT.N) y llevará torpedos pesados MK-48 de fabricación estadounidense.
Comenzará las pruebas de mar el mes próximo antes de su entrega a la Armada a finales de 2024.
Calificó los submarinos de disuasión estratégica para los buques de guerra chinos que crucen el estrecho de Miyako, cerca del suroeste de Japón, o el canal de Bashi, que separa Taiwán de Filipinas.
Huang indicó que los submarinos diésel-eléctricos de Taiwán pueden mantener a raya a China dentro de la primera cadena de islas, refiriéndose a la zona que va desde Japón a través de Taiwán, Filipinas y hasta Borneo, encerrando los mares costeros de China.
La armada china, incluido su portaaviones Shandong, se mostró cada vez más activa en los últimos meses frente a la costa oriental de Taiwán, lo que hace temer que China pueda lanzar un ataque desde esa dirección.
Huang dijo que los submarinos pueden ayudar a sustentar la línea de vida de la isla con el Pacífico, manteniendo abiertos los puertos de la costa oriental de Taiwán para suministros en caso de conflicto.
Chieh Chung, investigador militar de la Fundación de Política Nacional de Taiwán, indicó que la flota tendría problemas con esa tarea, porque China podría posicionar buques de guerra en el Pacífico antes de lanzar un ataque.
Pero, añadió que los submarinos podrían ocupar puntos estratégicos de emboscada en la región y dañar enormemente la capacidad de combate (de China) apuntando a buques de gran valor, como grupos de portaaviones o flotas de desembarco.
Taiwán dispone de cuatro submarinos, pero todos son antiguos. Dos de ellos datan de la Segunda Guerra Mundial, fueron cedidos por Estados Unidos en la década de 1970, y los restantes son modelos de la década de 1980 comprados de segunda mano a Holanda, según The Times. (Infobae/Reuters)