El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aseguró ayer que el Ejército ucraniano está ganando terreno gradualmente frente a las tropas rusas que se encuentran desplegadas en el país, desde el inicio de la invasión en febrero de 2022 y subrayó la importancia de la cooperación entre la Unión Europea y la Alianza Atlántica para poner fin a la guerra.

Así se pronunció durante una intervención ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo, donde reivindicó el apoyo a Ucrania, que debe continuar. «Son combates duros, pero fueron capacidades de romper la línea de defensa rusa, eso muestra la importancia de nuestra ayuda y nuestra disposición a seguir apoyándolos», aseveró.

Stoltenberg, recalcó que ambas instituciones son diferentes pero «tienen mucho en común», hizo hincapié en que «la guerra de Ucrania, hizo que esta cooperación sea aún más importante». «Es la guerra más brutal que hemos visto, la mayor guerra en Europa desde la Segunda Guerra Mundial y eso hace que sea aún más importante que estemos juntos», señaló.

«Nadie dijo que esto fuera a ser fácil. Estaba claro que iba a ser una ofensiva difícil y sangrienta porque, como hemos visto, los rusos prepararon sus líneas de defensa con trincheras, obstáculos con los que hacer frente a los tanques y minas. Cantidades enromes de minas. Difícilmente hubo más minas en un campo de batalla en toda la Historia, así que era obvio que iba a ser extremadamente difícil, pero los ucranianos decidieron llevar a cabo esta contraofensiva para liberar territorio, y están haciendo progresos», incidió.

Para Stoltenberg, es importante recordar que el Ejército ruso «solía ser el más fuerte del mundo», si bien ahora «es el segundo más fuerte de Ucrania», algo que tildó de impresionante. «Tenemos que recordar que al principio de la invasión los expertos creían que Kiev caería en cuestión de días y Ucrania en cuestión de semanas», puntualizó.

«La realidad es que los ucranianos están superando continuamente las expectativas y tenemos que recordar cuál es nuestra responsabilidad. Nuestra responsabilidad es la de apoyarles. No podemos sentarnos aquí en Bruselas, en la sede de la OTAN, y decirles cómo luchar», expresó antes de incidir en la relevancia de invertir en armas para garantizar la paz.

LOS ERRORES DE PUTIN

Asimismo, afirmó que el presidente ruso, Vladimir Putin, cometió dos grandes errores estratégicos en el marco del conflicto armado. «El primero fue, por supuesto, subestimar a los ucranianos; su fuerza, su compromiso, el liderazgo de sus líderes y de sus Fuerzas Armadas. El segundo subestimarnos. Subestimar nuestra voluntad, nuestro compromiso», explicó antes de matizar que se trata de algo sin precedentes.

En este sentido, resaltó que se trata de un apoyo mucho mayor de lo que nadie esperaba cuando comenzó la guerra y dio la enhorabuena a Países Bajos, Dinamarca y Noruega por anunciar el envío de cazas F-16. «También anunciamos que están listos para comenzar el entrenamiento de los pilotos y técnicos ucranianos para que puedan usar estos F-16», sostuvo.

«Comparado con lo que pensábamos que sería, semanas antes de la invasión, creo que tenemos que reconocer la fuerza y el compromiso (…) para que nuestras instituciones estén al lado de la Ucrania», señaló el exprimer ministro noruego, quien aprovechó la ocasión para recordar que durante la cumbre de la OTAN en Vilna el pasado mes de julio, se tomaron decisiones importantes para acercar a Ucrania a la adhesión.

También recalcó que se logró fortalecer la cooperación política e institucional entre las partes y recordó la creación del Consejo OTAN-Ucrania para facilitar el camino hacia la adhesión. «Las naciones deciden por sí mismas, y Ucrania tiene el derecho de decidir su propia ruta. Ucrania y los aliados de la OTAN decidirán cuándo se convierte en miembro», aseveró.

Stoltenberg manifestó a su vez que la OTAN tiene la necesidad de apoyar a Ucrania como aliado y prevenir una escalada, lo que llevó a reforzar el flanco oriental, en un claro mensaje a Moscú. «La OTAN está dispuesta a defender cada pulgada de territorio», indicó antes de instar a los Estados miembro a invertir en defensa. «Más dinero para defensa también nos permite invertir más en la producción de munición, lo cual es de vital importancia», ratificó.

SITUACIÓN EN EL MAR NEGRO

Sobre la situación en el mar Negro, Stoltenberg, aclaró que la zona es de gran importancia para la OTAN y condenó la retirada de Rusia del acuerdo de exportación de grano desde puertos ucranianos, al tiempo de agradecer los esfuerzos de Turquía por restablecerlo.

«Desde luego, la mejor manera de garantizar la seguridad del transporte de granos desde Ucrania es acabar con la guerra. La razón por la que tenemos estos problemas es precisamente por la guerra y el acuerdo de grano es solo una forma de mitigar sus consecuencias», añadió.

Por otra parte, destacó que la zona sur también es de gran relevancia: «La inestabilidad en el norte de África crea amenazas y desafíos para toda la Alianza, no solo para los aliados del sur».

Respecto a la relación de la Alianza con China, descartó que Pekín sea visto como adversario, pero admitió que existe una preocupación sobre los desafíos que supone a nuestros valores e intereses comunes». «China no comparte nuestros valores, no creen en la libertad de expresión ni en la democracia. Persiguen a periodistas, miembros de la oposición y disidentes», precisó, no sin alertar de la amenaza que supone para Taiwán.

«China está invirtiendo en armas nucleares modernas, más capacidades militares y misiles de largo alcance, cada vez en colaboración más estrecha con Rusia. (…) Tenemos que darnos cuenta de que la seguridad no es algo regional sino global y que lo que pasa en Ucrania importa», dijo Stoltenberg, que acusó a Rusia de elegir controlar a sus vecinos y restablecer su influencia.

«Decidir entrar en la OTAN no es una provocación, es una decisión democrática y soberana que todo Estado tiene derecho a tomar. (…) Rusia se alejó y no nos queda otra opción que garantizar la paz para los aliados y miembros de la UE invirtiendo en defensa y apoyando a Ucrania. Si Putin gana la guerra, será una tragedia para Ucrania, pero también un peligro para nosotros», finalizó. (Europa Press).