Las fuerzas rusas continúan minando la central nuclear de Zaporizhzhia y las instalaciones en el territorio de la planta, informó ayer la dirección principal de inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania en su canal de Telegram.
El mensaje, citado por las agencias, agrega que las minas y explosivos están siendo entregados a la instalación en estos momentos.
“En las salas técnicas y de turbinas se colocaron barreras explosivas de minas que consisten en minas antipersona de tipo direccional por control remoto y no dirigidas”, precisa.
Se trata principalmente de minas direccionales de tipo soviético MON-50, MON-90, MON-100 y MON-200, añade.
El mensaje incluye un mapa de la central nuclear en el que se muestran los posibles emplazamientos de las minas.
Las autoridades de la ciudad ucraniana de Zaporizhzhia, cerca de la planta nuclear más grande de Europa, bajo control ruso, dijeron que se están preparando para lo peor a medida que aumentan los temores de sabotaje.
Kiev y Moscú se acusaron mutuamente esta semana de planear un incidente en la planta, que cayó en manos de las fuerzas rusas al comienzo de su invasión lanzada en febrero del año pasado.
Kiev dijo que Rusia colocó explosivos en la planta y el presidente Volodimir Zelensky instó a la comunidad internacional a intervenir.
El ejército ucraniano dijo que las tensiones habían disminuido en la planta gracias a las fuerzas armadas y los esfuerzos diplomáticos con ayuda extranjera.
Pero en Zaporizhzhia, una ciudad con una población de antes de la guerra de alrededor de 750.000 habitantes a solo 50 kilómetros (30 millas) de la planta, las autoridades y residentes se están preparando en caso de una fuga de radiación.
Los recuerdos del desastre de Chernobyl, que azotó a Ucrania en 1986, aún persiguen al país devastado por la guerra.
“Es una gran amenaza”, dijo Olena Zhuk, jefa del consejo regional de Zaporizhzhia, y agregó: «la gente se está preparando, el gobierno también”.
A finales de junio, las autoridades de la ciudad realizaron simulacros para simular la evacuación masiva de 138.000 personas que vivían en un radio de 50 kilómetros de la planta.
Ese sería «el peor de los casos», dijo Zhuk. Las autoridades iniciarían varias respuestas según el tipo de incidente en la planta, dijo, y agregó que las posibles consecuencias podrían ser locales, muy locales o no locales.
Ella dijo que cree que Rusia podría organizar un incidente si las fuerzas de Kiev avanzarán al área en su contraofensiva.
El Ministerio de Salud de Ucrania emitió un comunicado para seguir las órdenes de evacuación en caso de explosión.
Dijo que los residentes más expuestos a la amenaza de radiación podrían ser informados de los puntos de evacuación.
Desde principios de junio, Kiev avanzó en varias partes del frente, incluso al este de la central eléctrica.
Mientras tanto, Moscú acusó a Ucrania de planear actos de sabotaje y ataques contra la planta de energía nuclear. (Infobae/Efe/Afp).