Luego de señalar a Ucrania como país impulsor y ejecutor del presunto ataque con drones sobre el Kremlin, Rusia acusó a Estados Unidos de ser el autor intelectual del hecho y afirmó que los ataques de sabotaje tras las líneas rusas alcanzaron un impulso sin precedentes.
El Kremlin había denunciado con toda contundencia que Ucrania llevó a cabo el ataque con dos aviones no tripulados con el objetivo de matar al presidente Vladímir Putin, una acusación que Kiev descartó de pleno a través de las palabras de su propio presidente, Volodímir Zelensky: “No atacamos a Ucrania ni a Putin, peleamos en nuestro territorio”.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, volvió a la carga ayer: “Las decisiones sobre este tipo de ataques no se toman en Kiev, sino en Washington”.
El portavoz del Kremlin aseguró que está en marcha una investigación exhaustiva del ataque con drones contra el Kremlin y que la respuesta rusa será equilibrada y correspondiente a los intereses del país.
Al ser preguntado sobre el impacto material de la caída de los restos de los drones derribados, Peskov dijo que resultaron dañadas dos placas de cobre de la cúpula del Palacio del Senado del Kremlin.
En cuanto a la reacción del líder ruso, Vladímir Putin, al presunto ataque, Peskov dijo que en situaciones extremas Putin siempre mantiene la serenidad, la concentración y la claridad en las evaluaciones y las órdenes que imparte.
CRECIENTES DUDAS
SOBRE EL ATAQUE
Pese a las afirmaciones del Kremlin, las dudas sobre el presunto ataque crecen.
Ucrania negó que sus fuerzas de seguridad intentaran asesinar a Putin. El presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, dijo que Rusia buscaría acusar falsamente a Ucrania y otros países porque “no tiene victorias que celebrar y ya no puede motivar a su público y enviar soldados a morir como si nada hubiera pasado”.
Según el Instituto para el Estudio de la Guerra, un grupo de analistas no partidista con sede en Washington, el gobierno de Rusia organizó el ataque con drones en un intento por llevar la guerra a la audiencia nacional rusa y establecer las condiciones para una movilización social más amplia en el país.
Estados Unidos también advirtió que hay que tomar con mucho cuidado todo lo que diga Rusia, mientras Francia calificó de extraño y misterioso el ataque, y lanzó una advertencia a Moscú de que no intente asesinar a Volodímir Zelenski, un escenario que plantean algunos responsables rusos.
“Sabotaje ucraniano sin precedentes”
El portavoz de la Presidencia rusa confirmó nuevamente que el desfile del 9 de mayo en la plaza Roja en el que intervendrá Putin se mantiene sin cambios.
Rusia también informó de una serie de ataques con drones contra instalaciones petrolíferas y descarrilamientos de trenes, de los que culpa a Ucrania.
En este sentido, el Ministerio de Exteriores ruso difundió un comunicado en el que recordó que Moscú se reserva el derecho a responder a los intentos de cometer atentados en Rusia.
Moscú pidió a otros países y organizaciones internacionales que condenen las acciones criminales de Kiev y le obliguen a cumplir con sus obligaciones en el ámbito de la lucha contra el terrorismo, el derecho humanitario y la protección de los derechos humanos. (Infobae).