El régimen de Irán ejecutó en la horca ayer a dos hombres que perpetraron un atentado en un santuario chií el pasado mes de octubre, con un balance de 13 personas muertas y que en su día fue reivindicado por el grupo terrorista Estado Islámico.
Los dos hombres fueron ahorcados en la ciudad sureña de Shiraz cerca del lugar del atentado. En el momento de la condena se estableció que la sentencia se ejecutará en público.
Los sujetos acusados fueron identificados como Mohammad Ramez Rashidi y Naeem Hashem Qatali.
Los hombres dijeron durante el juicio que habían estado en contacto con el Estado Islámico en el vecino Afganistán y que ayudaron a organizar el ataque al santuario Shah Cheragh en Shiraz.
El veredicto inicial contra los condenados se anunció el 16 de marzo de 2023. Este proceso fue confirmado por la Corte Suprema de Irán después de que el caso fuera revisado y se probara el papel directo de los dos terroristas en el diseño y apoyo del ataque.
Medios iraníes recordaron que el 26 de octubre de 2022, un hombre abrió fuego contra los peregrinos en un santuario chií de Shah Cheragh en Shiraz, la capital de la provincia de Fars, en el sur de Irán, donde 13 personas murieron y 30 más resultaron heridas. El atacante también murió.
El pasado marzo la Justicia iraní condenó a muerte a estos dos hombres por su participación en el atentado contra el mausoleo de la ciudad de Shiraz.
Los dos presos fueron condenados por corrupción en la tierra y por atentar contra la seguridad nacional.
Irán es uno de los principales países del mundo en la aplicación de la pena de muerte, con 314 ejecuciones llevadas a cabo en 2021, según Amnistía Internacional.
VIOLACIÓN DE DDHH
El pasado jueves, el Gobierno de Reino Unido informó sobre la imposición de un nuevo paquete de sanciones contra trece individuos y entidades relacionadas con la violación de Derechos Humanos en Irán, anunció que prepara una nueva legislación que permitirá ampliar el régimen de sanciones contra Teherán para castigar a sus dirigentes por sus acciones hostiles.
Las autoridades indicaron en un comunicado que entre los nuevos sancionados se encuentran jefes de prisiones, a los que Londres acusa de supervisar torturas y tratos inhumanos, organizaciones imputadas por recabar información personal de opositores e individuos acusados de ejercer actos de represión contra las mujeres iraníes mediante el código de vestimenta islámico.
Además, también serán objeto de estas sanciones el Consejo Supremo para la Revolución Cultural de Irán, que fija políticas en materia de educación, cultura, como el uso del hiyab y el Comando de Defensa Cibernética de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica, acusado de interceptar correos electrónicos y supervisar el contenido de páginas web de voces disidentes.
El ministro de Exteriores, James Cleverly, lamentó que el régimen iraní está oprimiendo a su propio pueblo y alertó de que el país amenaza con matar y secuestrar en suelo británico.
Señaló también que Reino Unido manda un claro mensaje al régimen de que no tolerará este comportamiento maligno y de que los responsables serán llevados ante la justicia. “Nuestro nuevo régimen de sanciones ayudará a garantizar que no hay un lugar seguro para aquellos que quieren dañarnos”, dijo. (Infobae/Afp/Efe).