Ayer en conferencia de prensa, el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, presentó fotografías en las que se puede ver a Erlan Ivar García, alias ‘El Colla’, junto al prófugo narcotraficante uruguayo Sebastián Marset en Dubái.
La autoridad agregó que en un operativo policial, desplegado para atrapar a una organización de sicarios, se logró aprehender a un hombre que tenía en su celular varias imágenes, audios y extractos de ‘El Colla’ que es considerado en Bolivia como la ‘mano derecha’ del fugitivo uruguayo.
“Este sujeto (el supuesto sicario) reconoció que trabajaría para ‘El Colla’, un sujeto que pretende quedar en libertad. Este (sicario) sería también piloto de Sebastián Marset. Esto se comprobó por audios y extractos encontrados en el teléfono celular”, enfatizó el ministro de Gobierno y añadió que también se encontraron imágenes, fechadas en abril de 2021, de García en el cumpleaños de Marset en Paraguay.
Durante la conferencia, la autoridad de Estado presentó imágenes de Marset junto a Roberto Arana que también es investigado por vínculos con el narcotráfico.
Justicia dicta
libertad de ‘El Colla’
Esta semana, el fiscal departamental de Santa Cruz, Roger Mariaca, informó que para salir de Palmasola en libertad ‘El Colla’ debe pagar una fianza de Bs 90 mil, tiene orden de arraigo y debe firmar el cuaderno de asistencia en oficinas del Ministerio Público, una vez a la semana.
Ante esta situación, Del Castillo afirmó que presentará una denuncia penal contra el juez que determinó libertad para ‘El Colla’. Además, cuestionó que la Justicia esté dispuesta a dejarlo en libertad y que con las nuevas imágenes presentadas, se comprueba que García es el segundo hombre al mando en la organización criminal de Sebastián Marset.
“No entendemos cómo un juez, que tiene múltiples antecedentes penales en la Justicia boliviana sigue trabajando para beneficiar a narcotraficantes”, manifestó el ministro de Gobierno y acusó al juez Primo Flores de “trabajar para liberar narcotraficantes”.
El 29 de julio a las 10 de la mañana, tres policías de inteligencia seguían al narcotraficante Marset por el Quinto Anillo y la avenida Beni, cerca de su mansión. Los uniformados fueron sorprendidos, secuestrados, golpeados y al final liberados por los guardaespaldas armados del uruguayo.
Según declaraciones de los tres policías, los guardaespaldas fuertemente armados les apuntaron con pistolas en sus cabezas y, al frente de Marset, los obligaron a subir a unos vehículos y luego a contar todos los detalles del plan que desarrollaba la Policía.
Mientras eran interrogados, los uniformados fueron amenazados y golpeados por Marset. Antes de dejarlos en libertad, los guardaespaldas les quitaron sus equipos de comunicación, un dron, teléfonos celulares y computadoras que utilizaban para sus trabajos de inteligencia.
El mismo día que secuestró a los policías, Marset huyó con su esposa, sus tres hijos menores y otros familiares. Hasta la fecha las autoridades desconocen su paradero.