“No puede haber muertes bajo custodia policial”, afirmó Álvarez al advertir que este caso debe ser esclarecido bajo las directrices establecidas en el Protocolo de Minnesota, que tiene el objetivo de proteger el derecho a la vida y promover la justicia, la rendición de cuentas y el derecho a una reparación mediante la promoción de una investigación eficaz de toda muerte potencialmente ilícita o sospecha de desaparición forzada.
Precisó que el Protocolo de Minnesota ordena identificar la causa de la muerte no sólo por las heridas o lesiones que pueda tener la víctima, sino también por las causas que habrían originado las mismas.
De acuerdo al reporte policial, el aprehendido, que esperaba su audiencia cautelar, se desvaneció, por lo que fue auxiliado a un centro médico, donde falleció debido a su situación de salud que era muy compleja.