Según la sala situacional del dengue del ministerio, en la semana 22 de este año la incidencia del dengue por cada 100.000 habitantes se ubicó en casi 387, el triple frente a 2022 y también mayor al 2017, cuando el país anotó un récord en medio de los estragos del fenómeno climático global de El Niño.
La mayoría de las muertes se produjeron en el norte, donde los centros de hospitalarios colapsaron porque rebasaron su capacidad, haciendo recordar la crisis sanitaria que sufrió el país por la pandemia del coronavirus.
Perú enfrenta desde inicios de año un temporal de lluvias por un calentamiento del mar frente a su litoral, llamado «Niño Costero». Las autoridades pronosticaron que a partir de junio se estaría desarrollando un “Niño global” con el aumento de temperatura del mar del Océano Pacífico fuera de lo normal.
Un fenómeno global de El Niño provoca lluvias e inundaciones en Sudamérica y sequías en otros lugares del planeta.
El temporal de lluvias generó una reproducción masiva de mosquitos por la acumulación de aguas, un escenario benigno para este insecto que transmite del dengue.
La presidenta Dina Boluarte firmó ayer un decreto para declarar un “estado de emergencia” por dos meses en 18 de las 24 regiones del país para permitir acciones oficiales rápidas por “peligro inminente ante intensas precipitaciones pluviales” este y el próximo año.
«Debemos preservar la salud de los habitantes que están atravesando este problema, para el cual contamos con todos los equipos de emergencia en cuanto a los rescates que puedan ser necesarios, así como los implementos necesarios para la atención de salud en nuestros diferentes centros de salud y hospitales, además del personal médico que requiere para estos casos», dijo la autoridad.
En tanto, la ONU dijo ayer que extendió su ayuda humanitaria y financiera a Perú para enfrentar los efectos de El Niño, porque luego de una evaluación que fue efectuada por dicha instancia se tiene todas las posibilidades que este fenómeno pueda extenderse a otras regiones.
El organismo afirmó que el fondo de emergencia de la ONU asignó unos 7 millones de dólares a varias coberturas para la atención de 245.000 personas adicionales que sufren de los estragos del clima en el país sudamericano. (Reuters).