En su informe más reciente, ONUSIDA demostró que muchos países ya están logrando poner fin al VIH, tales como Botswana, Eswatini, Ruanda, la República Unida de Tanzania y Zimbabwe.
«Los esfuerzos para acabar con el sida tienen éxito cuando, sustentados en un liderazgo político fuerte, siguen la evidencia; abordan las desigualdades que frenan el progreso; capacitan a las comunidades y organizaciones de la sociedad civil en sus roles vitales en la respuesta; y cuentan con el apoyo de una financiación suficiente y sostenible», afirmó Byanyima. «El camino que ponga fin al sida requiere la colaboración entre el Sur y el Norte, los gobiernos y las comunidades, el sistema de las Naciones Unidas y los Estados miembros», aseveró.
La Asamblea se llevará a cabo el 26 de septiembre de 2023 y los temas más importantes se debatirán durante la semana de alto nivel (18 al 26). Será entonces cuando ONUSIDA se unirá a líderes mundiales, expertos globales, defensores de los derechos humanos, defensores del medio ambiente y activistas para abordar los desafíos más apremiantes que enfrenta el mundo hoy en día, incluido poner fin al sida.
«En la Asamblea General de las Naciones Unidas, necesitamos energía global renovada para poner fin al sida. Esa energía debe ser liderada por los líderes mundiales, incluido el compromiso de brindar apoyo político y financiero para avanzar en la lucha contra el sida», recalcó Byanyima. «El movimiento contra el sida es uno de los mayores activos para el progreso global. El fin del VIH no es una alternativa a invertir en otros desafíos, sino la forma de superar otros desafíos», añadió. (Europa Press)