Los muebles, cristalería y demás objetos, que en este momento se encuentran dentro del nightclub Katanas, serán donados antes de su demolición, según afirmó Noemí Cámara, hija de Marco Cámara y dueña del local, quien aseguró que no quiere “ni un vaso” del lugar, donde se denuncia que se cometía el delito de trata y tráfico de mujeres.