Al inicio de esta semana, el lunes 28, se conmemoró 127 años de la masacre de Kuruyuki, último gran levantamiento guaraní contra la dominación “karai”. El 1 de enero de 1892, el corregidor de Ivo violó y mató a una mujer guaraní, pariente de un mburuvicha (cacique), hecho que desató el levantamiento indígena contra los hacendados. Los guaraníes, que habían sido sometidos por los misioneros franciscanos, los terratenientes y el ejército, venían preparando un movimiento para exigir la devolución de sus tierras.