Casas, vehÃculos, negocios y todo tipo de bienes materiales, fueron ch’allados con serpentinas, globos y pétalos de flores, entre otros artÃculos como forma de agradecimiento a la Pachamama. Desde tempranas horas, miles de paceños y alteños adornaron sus propiedades, en honor a los festejos carnavaleros.