Bogotá.- En medio de banderas blancas y con cánticos pidiendo justicia, fue recibido ayer por una multitud en el caserío Los Milagros, del departamento colombiano del Cauca (suroeste), el cuerpo sin vida de Yuliana Samboni, la niña indígena de siete años que fue secuestrada, violada, torturada y asesinada el pasado domingo en Bogotá.