La escalada de precios en Argentina no se detiene y ya alcanza a los productos más elementales de la canasta básica. En este caso, el pan, un alimento clave en la dieta argentina, que paga un IVA diferenciado, del 10,5%, la mitad del 21% que se grava al resto de los productos. El aumento del valor se origina por la subida en el precio de la harina y del gas, aunque el precio internacional del trigo se ha mantenido estable.