“Bolivia no está en crisis”, aseguró ayer el presidente en ejercicio de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), Kurt Koenigsfest, pero al mismo tiempo alertó que el crecimiento de la economía comenzó a sentir la “fase de descenso del ciclo de bonanza externa”, que se ha traducido en un repunte de 4.43% del Producto Interno Bruto (PIB) en el período junio 2015 al mismo mes de 2016. Koenigsfest reveló que en lo que va de la gestión, el sector realizó inversiones por el orden de los 2.300 millones de dólares, para contribuir al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), sin considerar la Inversión Extranjera Directa (IED).