El ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Milton Claros, confirmó ayer que el lujoso Jet que estuvo parado por varios meses en el aeropuerto El Trompillo, en Santa Cruz, y luego confiscado por la Aduana, ya es propiedad del Estado, y que de acuerdo con la ley aduanera nacional, es irreversible que la aeronave regrese a propiedad de sus anteriores dueños. Los propietarios anunciaron un proceso penal por incautación ilegal.