El año pasado, gracias a las condiciones climáticas favorables para el desarrollo del cultivo en la campaña de verano y a los buenos precios internacionales de la soya, se logró exportaciones por un valor de 1.371 millones de dólares, lo cual significó divisas importantes para el país. Este año se prevé una baja en la producción debido a la prolongada sequía. Por ello, para que el país se beneficie con la tendencia positiva de los precios de la soya, consideramos que el Gobierno debe facilitar el acceso de nuevos eventos de biotecnología para los productores, manifestó Fidel Flores, Presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo).