Los jugadores de Bolívar y el cuerpo técnico celeste terminaron el partido con bastante dolor y bronca, porque no pudieron anotar y sus rivales sí, en la última jugada. “Estamos muy dolidos, creo que el equipo hizo los merecimientos como para ganar el partido, la verdad que el fútbol a veces no tiene lógica, sobre la hora perdemos el encuentro por una desatención nuestra”, dijo el asistente de campo Cristian Vella, quien estuvo en el campo de juego, por la expulsión de Claudio Vivas. “Hoy tratamos de poner un equipo más dinámico, porque notamos que cuando vinimos a jugar a Santa Cruz estabamos sufriendo, hoy generamos muchas situaciones de gol, el rival generó pocas, el fútbol tiene de esas cosas”, matizó con el semblante serio el asistente de Bolívar. El hecho de poner muchos jugadores en funciòn de ataque, surtió el efecto esperado. “Teníamos que ganar el partido, jugamos con dos extremos, la realidad es que se tuvo las situaciones para ganarlo, pero el fútbol no tiene lógica”, apuntó. Por su parte, el entrenador de Blooming, Miguel Ponce, destacó la actitud y amor propio de su equipo. “Un trabajo táctico perfecto, cuando resulta asì todo es bueno, los jugadores hicieron bien las cosas, muy ordenados, anulando a un equipo de bastante jerarquìa como es Bolívar”.