La retención de estos funcionarios se produjo como represalia por la intervención de las autoridades en las prisiones, cuando los presos de seis centros tomaron el control de los mismos.
Este último enfrentamiento estalló tras varias redadas policiales y militares en las cárceles en los últimos días y, nada más conocerse la noticia, el Gobierno informó de que estaban tomando una serie de acciones para recuperar el orden en el sistema penitenciario.
«La información preliminar permite concluir que este suceso sería una respuesta de los grupos criminales ante las intervenciones de la fuerza pública en los centros penitenciarios del país”, señala.
Por su parte, el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, reconoció que las medidas implementadas contra el crimen organizado están generado reacciones violentas de las organizaciones criminales, pero aseguró mantienen una postura «firmes» y que no van a «retroceder en el objetivo de capturar a peligrosos delincuentes, desarticular bandas delictivas y pacificar las cárceles del país». (Europa Press).