La Organización de Naciones Unidas (ONU) advirtió ayer que el mundo debe prepararse para olas de calor más intensas, varias zonas del Hemisferio Norte experimentan temperaturas sofocantes que han provocado incendios y amenazan la salud de la población. Continúan activos los incendios en Grecia y Estados Unidos.
“Este tipo de situaciones continuará creciendo en intensidad, y el mundo necesita prepararse para olas de calor más intensas”, señaló a la prensa en Ginebra un experto en calor extremo de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), John Nairn.
“El fenómeno El Niño, recientemente declarado, no hará más que amplificar la incidencia y la intensidad de las olas de calor extremo”, indicó.
La canícula que afecta el Hemisferio Norte continuaba ayer con incendios activos en Grecia y Estados Unidos y un posible récord de temperatura para el continente europeo en las islas italianas de Cerdeña y Sicilia.
Las autoridades sanitarias han emitido alertas por calor en Estados Unidos, Europa y Asia, y recuerdan que es necesario hidratarse y protegerse del sol, en una nueva ilustración de los efectos directos del calentamiento global.
“Uno de los fenómenos notables que hemos observado es que el número de olas de calor simultáneas en el Hemisferio Norte se ha multiplicado por seis desde los años 1980. Esta tendencia no muestra ninguna señal de disminuir”, indicó el experto de la OMM.
Según los expertos, los gases de efecto invernadero que retienen el calor son los responsables del cambio climático.
LA ADVERTENCIA DE LA OMM
La ola de calor que azota el Hemisferio Norte se intensificará esta semana, provocando una subida de las temperaturas durante la noche, un mayor riesgo de infartos y muertes, dijo el martes la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
La OMM advirtió de que la ola de calor estaba en sus primeras fases y dijo que esperaba que las temperaturas en América del Norte, Asia, el norte de África y el Mediterráneo superaran los 40°C “durante un número prolongado de días esta semana, a medida que se intensifique la ola de calor”.
Esto podría significar temperaturas nocturnas que rondaría los 30 grados en algunas zonas esta semana, dijo.
“Las altas temperaturas nocturnas repetidas son especialmente peligrosas para la salud humana, porque el cuerpo es incapaz de recuperarse del calor sostenido. Esto provoca un aumento de los casos de infarto y muerte”, dijo a la prensa en Ginebra John Nairn, asesor principal sobre calor extremo de la OMM.
Panu Saaristo, de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR), señaló que los niños, los ancianos y las personas con enfermedades crónicas corren especial riesgo.
Según los expertos, más de 60.000 europeos podrían haber muerto en las olas de calor del año pasado, a pesar de contar con algunos de los mejores sistemas de alerta temprana del mundo. La FICR está llamando por teléfono a ancianos en Italia para ver cómo se encuentran, distribuyendo agua potable en Grecia y creando refugios para los afectados por el incendio en la isla española de La Palma, en Canarias, explicó Saaristo.
La agencia meteorológica de la ONU dijo que era posible que se batieran nuevos récords en los próximos días. La anterior máxima europea fue de 48,8ºC alcanzada en Sicilia en agosto de 2021 y el récord mundial es de 56,7ºC en el Valle de la Muerte, California, en julio de 1913, según la OMM.
“La ola de calor mediterránea es grande, pero nada que ver con lo que ha pasado por el norte de África”, dijo Nairn de la OMM. “En este momento se está desarrollando hacia Europa. Estamos en las primeras fases de esta ola de calor”.
Preguntado sobre si la actual ola de calor se debía al cambio climático, Nairn calificó de inusuales los sistemas meteorológicos “aparcados”, que se mueven lentamente. “Estos no son los sistemas meteorológicos normales del pasado. Hay que reparar el clima para cambiarlo”, afirmó. (Infobae/AFP/Reuters).