“Una vez conocido el hecho, se inició con la investigación penal. Por intermedio de la víctima se tomó conocimiento del lugar, el tiempo y la forma en que el sindicado hubiese perpetrado el ilícito, en reiteradas ocasiones. Asimismo, el certificado médico, expedido por el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF), evidenció la agresión sexual”, informó la fiscal departamental de Potosí, Roxana Choque.
De acuerdo a la información el delito se consumó, por primera vez, en la gestión 2020, cuando la adolescente tenía 13 años, siendo recurrente hasta julio del 2022, que fue la última vez.
El sujeto aprovechó la confianza de los padres de la víctima para cometer el delito y cuando los progenitores se enteraron del hecho, no dieron crédito de lo ocurrido a su hija, pero a insistencia de la adolescente al final fue escuchada.
En este caso, la denuncia fue presentada por la madre de la víctima el 31 de agosto de 2023, con apoyo de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia del municipio de Uncía, por lo que el sujeto fue aprehendido.