El fiscal departamental de Oruro, Aldo Morales, informó ayer que el Ministerio Público inició una investigación por el delito de Infanticidio en grado de Tentativa en contra de Bismar Y. S., de 35 años, quien dejó con seis días de incapacidad a su hijo de ocho años. Debido a que un juzgado dictó detención domiciliaria a favor del sujeto, la Fiscalía apeló a la medida y solicita 20 años de prisión.
De acuerdo con la Fiscalía, el sujeto propinó varios golpes a su hijo e intentó estrangularlo por el cuello, todo por no encontrar su teléfono celular. Las investigaciones corroboraron que el niño presentó señales de golpes en la espalda y el cuello. Tras la valoración médico forense del menor, se le otorgó seis días de incapacidad médico legal.
Pese a tales actos criminales, el Juzgado Cuarto de Instrucción Penal Anticorrupción y Lucha Contra la Violencia Hacia las Mujeres determinó su detención domiciliaria, además de medidas de protección para la víctima, razón por la que la Fiscalía decidió apelar la decisión judicial y pedir una sentencia de 20 años, de acuerdo con la pena establecida en la ley.
“El caso de Tentativa de Infanticidio se presentó cuando el padre llegó a su domicilio en estado de ebriedad y al no encontrar su celular descarga su rabia en contra de su hijo de ocho años de edad. La víctima hizo referencia a que su papá lo quiso estrangular, situación que fue verificada por los médicos forenses, la Policía como el Ministerio Público”, expresó Morales.
El fiscal del caso, Luis Aurelio Santos, explicó que, de acuerdo a los antecedentes, el hecho se registró el 28 de julio de 2024 a horas 08:30 en una vivienda de la ciudad de Oruro.
“En estado de ebriedad, (el padre) se dirigió a la habitación de su hijo en busca de su celular, pero al no encontrarlo se acercó al niño y le propinó 11 golpes de puñete en su espalda. No conforme con ello, lo agarró del cuello para ahorcarlo y luego procedió a pisarle el cuello”, detalló. (Con información de FGE)