El Ministerio Público mexicano señaló directamente al director de la institución, Francisco Garduño, por el presunto delito de homicidio de 40 personas, así como por lesiones a otros 25 migrantes que resultaron heridos. Junto a Garduño, la Fiscalía ha acusado a otro directivo del que no trascendió su identidad.
Ambos directivos habrían incurrido en presuntas conductas delictivas al incumplir sus obligaciones de vigilar, proteger y garantizar la seguridad de los migrantes internos en las instalaciones del INM en Ciudad Juárez.
Asimismo, la Fiscalía también procedió penalmente contra otros cuatro empleados presentes en el centro de migrantes el día de los hechos por conductas que produjeron los homicidios y las lesiones de los internos.
El pasado 27 de marzo se registró un incendio en un centro del INM en Ciudad Juárez que se saldó con la muerte de 40 personas. Más tarde, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, acusó a los propios internos de originar el fuego al prender un colchón en señal de protesta ante una posible futura deportación.
Además, una grabación de las cámaras de seguridad sembró aún más polémica donde en ella se podía apreciar cómo algunos migrantes quedaban encerrados en celdas mientras funcionarios del INM abandonaban el centro sin socorrerles.
Por su parte, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, solicitó esperar a conocer todo el alcance de la investigación que ya se ha puesto en marcha antes de tomar una decisión sobre la continuidad o no de Garduño.
«Vamos esperar que es lo que está de por medio, cuál es la acusación y tomaremos la decisión en su momento», dijo el mandatario durante su habitual comparecencia matutina ante los medios de comunicación.
«Puede ser que se acuse a algunos por omisión y otros por homicidio, falta que la Fiscalía informe más», señaló López Obrador, quien volvió a recalcar, como ya hiciera en su momento, que no habrá impunidad. «Ya no son los tiempos de antes», finalizó. (Europa Press)