“Ante la deficiente administración del Ejecutivo en el sistema de aeronavegación, desde las denuncias de los pasajeros hasta los escándalos de narcotráfico, es necesario impulsar nuevas operaciones que beneficien a la población, con mayor eficiencia y transparencia”, sostuvo Pedrazas.
El legislador recordó que actualmente está vigente un convenio de comodato entre el Gobierno Autónomo Departamental de Chuquisaca y la Fuerza Aérea Boliviana para la administración del hub y terrenos del aeropuerto en Sucre.
La Eptam, dependiente del Ministerio de Defensa y la FAB, desarrolla actividades desde 2019 en el aeropuerto de la capital del Estado, aunque limitando sus operaciones a vuelos chárter en su única nave habilitada.
Las representaciones y autoridades de Sucre apoyan la rehabilitación del aeropuerto, puesto que la actual terminal de Alcantarí, a cargo de las entidades bajo tuición del Ministerio de Obras Públicas, tienen denuncias de deficiente infraestructura y pésimo servicio, situación que va en contra de la imagen e intereses de todo el departamento.
Pedrazas destacó que una administración militar le daría proyección al aeropuerto Juana Azurduy de Padilla, porque además es la FAB la entidad llamada a integrar a la nación.
El diputado deploró que la capital del Estado no cuente con una terminal aérea, más aún cuando se aproxima 2025, año del Bicentenario de la República y el flujo turístico irá en aumento hacia Sucre.
“No puede ser que la capital de Bolivia carezca de un aeropuerto cuando estamos cerca del Bicentenario. Y peor, que teniendo la infraestructura necesaria se la abandone o desmantele o se piense en darle a este aeropuerto otro destino ajeno al servicio público de aeronavegación”, concluyó el diputado chuquisaqueño.