Los caraqueños pasaron la noche del viernes en vela junto a la sede del Banco Central de Venezuela, a una manzana del Palacio de Miraflores, sede del Gobierno, tras la decisión del presidente, Nicolás Maduro, de decretar la muerte del billete de 100 bolívares. A pesar que la entidad estará cerrada durante este fin de semana, los ciudadanos hicieron una cola gigantesca, que daba tres vueltas, para cuando el lunes reabran las ventanillas para poder cambiar los billetes prohibidos. Disponen de apenas cinco días para la operación de canje, pero los nuevos billetes siguen sin aparecer.
No se encontro contenido.