El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, el español Josep Borrell, asegura que la invasión de Rusia en Ucrania deja unos crímenes de guerra de proporciones históricas comparables solo con los de la II Guerra Mundial.

“Putin sacrifica a su pueblo y a su ejército para su supervivencia personal y política”, subrayó en una entrevista. Agregó que el presidente ruso suponía que iba a ser una guerra relámpago, pero que tras 18 meses, fracasó en su invasión de Ucrania, dejando la destrucción sistemática de ese país.

Por otro lado, analizó el papel de China, país que considera un verdadero actor geopolítico, mientras que Rusia es como una gasolinera cuyo propietario tiene una bomba atómica.

Y aunque “China es demasiado importante para ignorarla, pero también para intentar aislarla”, para Borrell es necesario un diálogo que permita cooperar en la resolución de los problemas comunes y no contribuya a una polarización del sistema internacional que derive en un mundo bipolar.

El jefe de la diplomacia de la UE se refirió también al golpe militar en Níger: “Hacen falta soluciones africanas a problemas africanos”.

En este sentido, señaló que en el Sahel no se ganarán guerras asimétricas e irregulares si no se gana la batalla del desarrollo y deja de lado la posibilidad de que el golpe militar sea resultado de una conspiración rusa, aunque, para Borrell, Rusia se aprovecha de la situación.

Asimismo, en días recientes, Borrell, denunció los perversos ataques rusos contra la infraestructura portuaria de Odesa, que dejó como resultado la destrucción de miles de toneladas de grano, asegurando que van a provocar una gran crisis alimentaria a nivel mundial.

“Por tercera noche, Rusia bombardea y destruye la infraestructura portuaria de Odesa y el almacenamiento de grano. Se quemó más de 60.000 toneladas de grano. No sólo se retiran del acuerdo de grano para exportar el grano de Ucrania, sino que lo están quemando”, denunció el jefe de la diplomacia europea en declaraciones a su llegada a la reunión de ministros de Exteriores de la UE.

Alertó sobre la enorme crisis alimentaria en el mundo que va a provocar las acciones rusas contra Ucrania. “Si este grano no se almacena y se destruye, significa que habrá una escasez de alimentos, de grano, en el mundo”, advirtió, tras señalar que los responsables de Exteriores de los Veintisiete podrán tratar la situación con su homólogo ucraniano, Dimitro Kuleba, por videoconferencia.

Por otra parte, Borrell declaró que la UE no reconocerá a los golpistas de Níger que tomaron el poder hace unas semanas y que suspenderá la cooperación en materia de seguridad con el país azotado por el yihadismo. (Infobae/Efe).