El crecimiento del 4,2 por ciento que destacó el Ministerio de Economía no refleja la realidad del país, porque Bolivia aún depende de la producción y exportación de materias primas, mismas que tuvieron una caída considerable en los últimos años, según parlamentarios de la oposición, es decir que esa cifra macroeconómica no coincide con la realidad de los bolivianos que deben solventar precios elevados de productos de primera necesidad.
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