Luego de programarse la tercera interpelación contra el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, para la próxima semana y confirmarse una cuarta comparecencia de la autoridad ante la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) para el mes de agosto, desde el Comité Nacional en Defensa de la Democracia (Conade) se puso en duda la posibilidad de una censura debido al sistema de subordinación que el oficialismo ejerce sobre el Parlamento.
En criterio de Manuel Morales, vocero del Conade, es improbable que las próximas sesiones de interpelación al ministro de Gobierno u otras autoridades del Ejecutivo deriven en una posible censura.
“Al final sale el apoyo o el voto de confianza. Esto se debe a un factor que es mayor a la división que actualmente hay en el MAS, es un esquema general de subordinación que hay en el parlamento al gobierno central”, dijo.
El activista por la democracia aseguró que esta subordinación es estructural y característica de los gobiernos de corte autoritario, misma que se impulsó y consolidó en todos los años del Movimiento al Socialismo en el poder, hecho que evita la posibilidad de que el Parlamento nacional emita un voto de “no confianza” contra cualquier miembro del Ejecutivo.
En este sentido, sostuvo que el pensar en un Parlamento con algún grado de independencia, autonomía o de fiscalización efectiva, sería caer en la ingenuidad, pues al final se alcanzarán acuerdos o convergerán varios factores que generen interpelaciones fallidas.
“Las cartas ya están echadas. Mientras vivamos en un Estado autoritario no hay posibilidad de una independencia y fiscalización por parte de la ALP al Gobierno del presidente Arce”, finalizó Morales.
El viernes, desde la presidencia de la Asamblea Legislativa Plurinacional, se programó la instalación de la décima quinta Sesión Ordinaria de esta instancia para el próximo martes 27 de junio, a las 14:30 horas, con la finalidad de proceder con la interpelación al ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, en referencia al tráfico de vehículos en territorio nacional.
Ese mismo día, miembros de la bancada de Creemos, confirmaron la realización de otra sesión interpelatoria a este funcionario, para el 30 de agosto, esta vez por el escándalo provocado por el transporte de 478 kilos de cocaína a España desde el aeropuerto de Viru Viru en febrero pasado.