En los últimos años muchos ciudadanos provenientes de China, hicieron varios intentos para acceder a instalaciones militares en ese estado ubicado al noroeste del país, según funcionarios del país norteamericano.
En esta oportunidad, un vehículo con ciudadanos chinos pasó a gran velocidad por un puesto de control de seguridad en Fort Wainwright en Fairbanks, de acuerdo con una publicación del medio estadounidense USA TODAY.
El auto finalmente fue detenido y se encontró un dron dentro. Los ocupantes afirmaron que eran turistas que se habían perdido.
Varios de los incidentes relacionados con personas que intentan ingresar a las instalaciones militares estadounidenses se atribuyeron a errores inocentes por parte de visitantes extranjeros que intentan ver la aurora boreal y otras atracciones en Alaska, según publica USA TODAY, citando a funcionarios de las fuerzas norteamericanas.
Sin embargo, hay otros casos en los que estos intentos de ingresar a las bases de EEUU parecen ser investigaciones para conocer las capacidades militares del país en Alaska, según varios soldados familiarizados con los incidentes pero que según USA TODAY, no estaban autorizados a hablar públicamente sobre ellos.
De acuerdo con el medio local, un oficial del Ejército aseguró que no todos los que parecen ser turistas en Alaska en realidad lo son, de hecho, en cambio son espías extranjeros, dijo el funcionario.
Los detalles sobre los incidentes permanecen en su mayoría clasificados. Sin embargo, los informes militares y la información disponible públicamente explican por qué el régimen chino estaría interesado en
Alaska, donde residen algunas de las capacidades militares más sofisticadas del Pentágono y los juegos de guerra de alto nivel.
La semana pasada, el gobierno de Estados Unidos anunció el arresto de un hombre acusado de ser un agente chino que espiaba a disidentes en el área de Boston, en el noreste estadounidense.
Litang Liang, de 63 años, fue arrestado y acusado de actuar como agente no declarado de la República Popular China, según un comunicado del Departamento de Justicia.
Se sospecha que, entre 2018 y 2022, proporcionó a las autoridades chinas información sobre miembros de la comunidad china de Boston que apoyaban la democracia en Taiwán.
En particular, se le acusa de haber transmitido a Beijing el nombre de una persona sospechosa de haber dañado una bandera china, el video de un activista filmado durante una manifestación a favor de Hong Kong y fotografías de disidentes chinos.
Litang Liang enfrenta hasta diez años de prisión.
Estados Unidos arresta regularmente a personas acusadas de ser espías chinos. En abril, dos estadounidenses de origen chino fueron acusados de establecer una “comisaría clandestina” en Nueva York para vigilar a los disidentes.
Beijing, que niega cualquier acusación de espionaje, no se queda atrás. Un estadounidense de 78 años, John Shing-wan Leung, residente permanente en Hong Kong, fue condenado en China a cadena perpetua por “espionaje”.
Estos casos agregan nueva tensión a las relaciones entre ambos países, enfrascados en una feroz competencia diplomática, militar, tecnológica o económica. (Infobae/Afp)