La declaración no equivale a un estado de excepción constitucional ni tampoco implica algo distinto en el despliegue de las Fuerzas Armadas, sino que agiliza los procesos administrativos para desembolsar recursos, explicó la ministra en una conferencia de prensa.
El presidente Gabriel Boric interrumpió un viaje que estaba desarrollando en el extremo sur del país para volver a Santiago ante la emergencia, agregó.
“Se declaró zona de catástrofe desde (la región de) Valparaíso hasta la región del Biobío y el objeto de esto, es reforzar aún más las facilidades administrativas en la ejecución de los recursos y de las ayudas, adicionalmente a lo que ya estaba dispuesto producto de la alerta y los fondos de emergencias”, agregó Tohá.
Valparaíso está en el centrosur del país, vecina a Santiago, y el Biobío a unos 500 kilómetros al sur de la capital.
Tohá dijo que hay 2.759 personas aisladas y se está trabajando de distintas maneras para contactarlas y apoyarlas, desde vuelos de helicópteros para evacuarlos o por agua, pero las condiciones climáticas dificultaron dichas evacuaciones.
Además a nivel nacional hay un total de 419 personas damnificadas, 1.002 albergadas y tres personas desaparecidas.
“Desde el año 1993 que no teníamos lluvias de esta magnitud (…). En lo que traen los cursos de agua, como inundaciones, cortes de puentes, afectación de caminos, desde el 93 que no teníamos la situación que estamos viviendo ahora”, dijo.
A partir ayer existen cortes programados de agua en más de la mitad de los municipios de la Región Metropolitana de Santiago, de 7 millones de habitantes, y otras localidades y ciudades afectadas por el frente de lluvias que enturbia el agua de los ríos que nutren a Santiago y los sistemas de agua potable.
Al menos 50.000 personas están sin suministro eléctrico, concentradas en la región metropolitana de Santiago y en la región del Maule, en el centro sur, de acuerdo con las autoridades. (Reuters).